Imagen: La ministra de Sanidad Mónica García. Juan Carlos Hidalgo. Efe
El Gobierno ha dado luz verde al anteproyecto de ley del medicamento que reforma un sistema anclado en los noventa. La norma introduce cambios en cómo se establecer los precios para que los genéricos ganen peso en el mercado, para permitir recetar fármacos a enfermeras y fisioterapeutas y para dar más competencias a los fármacos con el fin de evitar que los pacientes tengan que volver al médico si la farmacia no tiene disponible el medicamento.
Según cálculos del Ministerio de Sanidad, se ahorrarán más de 1.300 millones de euros anuales en gasto farmacéutico púbico -que asciende a 23.000, un 3,6% de la inversión pública y un 2% del PIB- y paliará los problemas de suministro que tanto España como Europa padecen desde hace años.
Primero, será necesaria una inversión de 350 millones de euros para mejorar los sistemas de información y precios, que saldrán del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El Gobierno va a tramitar de urgencia una ley en la que espera contar con el apoyo de la mayoría de grupos parlamentarios.
Copago
La modificación que plantea el Ministerio ampliaba de tres a seis los tramos de renta que determinan cuánto debe asumir el paciente de su bolsillo y, como resultado, bajaba la aportación de las más bajas (hasta los 35.000 euros) y subía en los siguientes escalones. Además, introducía por primera vez un tope mensual a la población activa que ingrese menos de esos 35.000 euros. Hasta ahora solo lo tienen los pensionistas.
Genéricos
Con esta reforma, se permitirá mantener un precio más barato en el genérico para que gane terreno y a las marcas, si así lo deciden, preservar uno más elevado. A cambio, los fármacos que queden por encima de ese umbral podrán seguir siendo financiados de manera parcial. Por ejemplo, si el paciente prefiere comprar una marca en lugar del genérico, no tendrá que asumir el precio completo porque una parte –equivalente al precio más bajo del sistema– quedará subvencionada. Una especie de copago evitable.
Recetas de enfermeras y fisios
La nueva ley da la capacidad a las enfermeras y fisioterapeutas de prescribir fármacos dentro de sus competencias. Hasta ahora, solo podían hacerlo en muy contadas excepciones, que se encontraban con trabas burocráticas y el rechazo de algunas instituciones médicas, ya que defienden que solo los facultativos pueden recetar medicamentos. Con la ley actual, también pueden hacerlo podólogos y odontólogos, a los que ahora se sumarán estos dos gremios.
Otra de las novedades es que el médico podrá dejar una receta fija para que los pacientes con dolencias crónicas recurrentes la usen a demanda sin pasar por la consulta. Hasta ahora, este tipo de prescripción dura solo un año. Un ejemplo sería alguien que tenga episodios de migrañas esporádicos: no tendrá que ir al médico cada vez que le surgen, podrá retirar el medicamento directamente de la farmacia.
Más competencias a las farmacias
Los cambios también tocan a las oficinas de farmacia. Hasta ahora, en el mostrador solo se puede dispensar la prescripción exacta que anota el profesional sanitario. Por ejemplo, paracetamol en sobres. La reforma abre la puerta a que el paciente pueda comprar, bajo el paraguas de la misma receta, comprimidos en lugar de sobres si tienen la misma cantidad y son el mismo principio activo sin necesidad de volver al médico a obtener otra receta.