El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón ha enviado a juicio al excomisario José Manuel Villarejo y a dos periodistas por el caso Dina. Trama que versa sobre robo del móvil de Dina Bousselham, exasesora de Pablo Iglesias, en 2015 y el supuesto uso en perjuicio de Podemos de la información que guardaba.
García-Castellón, ha dictado un auto este lunes en el que acuerda la apertura de juicio oral contra los tres por un delito de descubrimiento y revelación de secretos.
Fiscalía Anticorrupción pide 5 años de cárcel para Villarejo y 3 para los dos periodistas encausados, imputando a los tres un delito de descubrimiento y revelación de secretos con difusión a terceros. Interesa además, como responsabilidad civil, que los tres indemnicen solidariamente y a partes iguales a la exasesora de Podemos con la cantidad de 5.000 euros y a Pablo Iglesias con 1.000 euros.
Robo de la tarjeta móvil y difusión de la información.
Cabe recordar que la Fiscalía Anticorrupción solicita 5 años de cárcel para Villarejo y 3 para los dos periodistas encausados, imputando a los tres un delito de descubrimiento y revelación de secretos con difusión a terceros. Interesa además, como responsabilidad civil, que los tres indemnicen solidariamente y a partes iguales a la exasesora de Podemos con la cantidad de 5.000 euros y a Pablo Iglesias con 1.000 euros.
El titular del Juzgado Central de Instrucción Número 6 recoge el relato de los hechos de la Fiscalía, en el que detalla cómo los dos periodistas recibieron de una persona anónima, el 19 de enero de 2016, la tarjeta del móvil de Bouselham que le habían sustraído unos meses antes y se la entregaron a Villarejo, por entonces comisario de la Policía Nacional.
La instrucción del «Caso Dina» comenzó en 2019. Todo a raíz de la obtención en 2017 en un registro policial al excomisario Villarejo, guardada las carpetas DINA 2 y DINA 3, que almacenaban archivos de la tarjeta de memoria que había sido robada a la exasesora de Pablo Iglesias dos años antes.
El juez del caso, Manuel García-Castellón, procesó a los dos periodistas al considerar que fueron quienes le entregaron parte de la información que contenía esa tarjeta, de carácter privado y que había llegado a sus manos en enero de 2016. Los periodistas siempre han alegado su inocencia y han justificado que entregaron aquella información porque se trataba de un requerimiento policial.
Cuando el excomisario se hizo con la información, este «con abuso de sus funciones« policiales, Villarejo entregó dichos archivos a periodistas de su confianza para que «publicaran diversas informaciones en descrédito» de Podemos y de Pablo Iglesias, según la Fiscalía.
Por su parte, Pablo Iglesias sostiene que el robo de la tarjeta y la «circulación» de su contenido «tuvo el claro objetivo» de perjudicarle a él y al partido