Daniel Sancho mantuvo una serie de interacciones por mensajes de texto con Edwin Arrieta, a quien había asesinado y cuyo cuerpo había descuartizado, en un intento de simular que este último se había ido de fiesta y había desaparecido. Estos mensajes revelan los intentos de Sancho por encubrir el crimen que había cometido.
Preocupado por la desaparición de Arrieta
En la madrugada del jueves 3 de agosto, Sancho envió una serie de mensajes a Arrieta después de haber desechado partes de su cuerpo en diferentes lugares de la isla de Koh Samui. En uno de los primeros mensajes, enviado a las 1:56 horas, Sancho preguntó a Arrieta dónde se encontraba y mostró su preocupación por su ausencia: “¿A dónde te has ido? Tengo poca batería y no me cargan esto en ningún lado. ¿Dónde estás? No puedes irte así. Qué cojones haces«.
Una fiesta y consumo de drogas
Utilizando un tono preocupado, Sancho continuó enviando mensajes en los que fingía buscar a Arrieta, haciéndole creer que estaba preocupado por su bienestar. En estos mensajes, Sancho intentaba dar la impresión de que Arrieta se había ido de fiesta y había consumido drogas, como sugirió al mencionar la playa de Haad Rin, conocida por sus festivales: “chiqui, dónde estás. Estoy muy, muy preocupado. Hace horas que no te veo. Te has metido en la locura máxima de Haad Rin”.
Una posible llamada a la policía
A medida que pasaba el tiempo y Sancho no recibía respuesta de Arrieta, sus mensajes reflejaban una creciente ansiedad y confusión. Finalmente, en un mensaje enviado a las 3:55 horas, Sancho expresó su preocupación por la ausencia prolongada de Arrieta y sugirió la posibilidad de llamar a la policía: “chiqui, por favor, tienes que responder. Voy a tener que llamar a la Policía”. “No entiendo nada. Tengo miedo. Había venido a buscarte a la playa que estuvimos antes porque era el lugar que conocías, pero seguro que no recuerdas el nombre y menos en este estado”.
Encubrimiento del crimen
Estos mensajes sirvieron como parte de la estrategia de encubrimiento de Sancho, quien más tarde admitió haber matado a Arrieta en una pelea. A pesar de sus intentos por ocultar el crimen, el juicio en contra de Sancho continúa, con detalles escalofriantes que van saliendo a la luz a medida que avanza el proceso judicial.