El geógrafo y trotamundos Pausanias de la región de Lidia (siglo II d.C.) hizo de su vida una aventura en la que recorrió diversas ciudades y visitó numerosos monumentos para describir su arte, historia y mitología.
Pausanias, tu guía turístico griego
En su Descripción de Grecia, cada libro está dedicado a un área distinta: I a Ática, II a Corinto, III a Lacedemonia, IV a Mesenia, V y VI a la Élide, VII a Acaya, VIII a Arcadia, IX a Beocia y X a la Fócide y Lócride.
Pese a las críticas de los estudiosos y la poca revalorización de la obra hasta hace pocos años, no se trata de un mero catálogo topográfico, sino que constituye una fuente muy importante de información combinada con reflexiones personales por el detallismo del arte y de las localizaciones que existen o no en la actualidad.
A continuación, presentamos algunos fragmentos de gran interés.
El folleto de la Acrópolis
Sin duda, es el tesoro de la ciudad de Atenas y Pausanias no escatima en sus observaciones en el libro I, capítulos 22-28. Nos indica la orientación de sus componentes: Propileos, Erecteion y el Partenón, entre otros, con sus estatuas, pinturas y relatos mitológicos que los adornan, como la lucha de Atenea y Poseidón.
Delfos y sus templos mágicos
Delfos fue bien conocido en el mundo griego como el centro espiritual y no es para menos, puesto que en él se envuelve un aura de misterio que Pausanias recoge en su libro X, capítulos 5 y siguientes. Lo peculiar reside en la manera de construcción de los cuatro santuarios: el primero, hecho de laurel; el segundo, realizado por abejas de su cera y de plumas; el tercero, con un diseño de bronce y, por último, el cuarto se edificó en piedra, pero se quemó y se volvió a erigir.
El mar Muerto
Al hablar del río Alfeo en Olimpia y su mitología en el libro V, capítulo 7, Pausanias nombra por primera vez al “Mar Muerto”, en su momento conocido como el lago Asfaltites. Destaca con curiosidad cómo los seres vivos flotan, los muertos se hunden y los peces huyen.
¿Es un pájaro? ¡No! ¡Es Platón!
En el libro I, capítulo 30, menciona que “cerca de la Academia está el enterramiento de Platón” (una forma bastante poco exacta de localización) y añade cómo un cisne se le apareció en sueños a Sócrates y a su muerte se transformó, de nuevo, en un pájaro.
Y otras muchas descripciones conocidas son el teatro de Epidauro (libro II, capítulo 27), las legendarias siete puertas de la ciudad de Tebas (libro IX, capítulo 8) o la estatua de oro y marfil de Zeus en Olimpia (libro V, capítulo X), siendo una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo. A fin de cuentas, a Pausanias no le importa la distancia para desplazarse si el disfrute del camino y el amor a Grecia son mayores.