Eslovenia ya podía saborear lo que era su primera victoria en una Eurocopa. La estaba consiguiendo gracias al gol de Karnicnik a los 69′, pero Luka Jović tenía otro plan en mente. En el último centro de la tarde de Munich, apareció el ex-Real Madrid para de cabeza sentenciar el 1-1 y arrebatarle a Oblak y compañía un triunfo que los acercaba a los octavos de final. El punto le permite a Serbia ilusionarse con la clasificación y todo puede pasar en la última jornada.
Fue un partido cambiante, con situaciones en ambas áreas y un final electrizante. Comenzó mejor Eslovenia, probando a Rakjovic con remates de Stojanovic y Mlakar y acechando con centros desde ambos costados. Contestó Serbia a través de Vlahovic y Mitrovic, el de la Juve con un cabezazo y el ex-Fulham con un remate que obligaron la reacción de Jan Oblak. Y pese a una muy clara en los pies de Elsnik estrellada en la madera, al descanso se fueron 0-0.
Llegan las emociones
Las Águilas Blancas levantaron algo de vuelo en el complemento de la mano de Tadic y comenzaron a llegar más asiduamente al arco de Oblak, aunque la apertura del marcador estaría a cargo de Karnicnik. El lateral derecho comenzó un contraataque con un quite y lo finalizó él mismo empujando al gol un preciso centro de Elsnik. Pero ese no fue todo todo su aporte. Instantes después, con un toque casi imperceptible, evitó lo que era el empate de Mitrovic. La volea del serbio tuvo destino de larguero en lugar de red gracias al esfuerzo del jugador del NK Celje del su país.
Los minutos corrían y pese al esfuerzo serbio, Eslovenia parecía tener todo bajo control. Hasta que un corner brillantemente ejecutado por Ivan Ilić a los 95′ cayó justo en la cabeza de Luka Jović y el resto ya es historia conocida. A la espera de lo que suceda entre Inglaterra y Dinamarca, ambos equipos saben que deberán sumar en la última fecha para soñar con la clasificación.