Ariane Tabatabai/Imagen de semafor.com
Una funcionaria del Pentágono está siendo observada por las autoridades estadounidenses debido a la filtración de documentos que revelaron los escenarios que Israel está considerando para su respuesta al ataque contra Irán. De acuerdo con información que proviene de una carta enviada al secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, por senadores estadounidenses, se trata de la iraní-estadounidense Ariane Tabatabai. Al mismo tiempo, Sky News Arabia informó que un funcionario del Pentágono vinculó ambos casos, afirmando que Tabatabai se encuentra entre las personas que están siendo investigadas por la filtración.
La funcionaria en cuestión ocupa un puesto de alto rango en el Departamento de Defensa, titulado «Jefe de Gabinete del Subsecretario de Defensa para Operaciones Especiales y Conflictos de Baja Intensidad», según su perfil de LinkedIn y la carta de los senadores. Según lo que indicaron los senadores en su carta, fechada el 29 de septiembre, había una profunda preocupación por Tabatabai, a quien acusaron de formar parte de la llamada «Iniciativa de Expertos en Irán». Esta iniciativa fue lanzada por altos funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores iraní en un esfuerzo por reforzar la imagen y las posiciones de Teherán en cuestiones de seguridad global, particularmente en relación con su programa nuclear.
Los senadores Roger Wicker, Charles Grassley, Mike Crapo y John Cornyn pidieron a la administración de Austin que tome medidas inmediatas para garantizar que la seguridad de Estados Unidos no se vea socavada. Wicker incluso señaló en una publicación reciente que había solicitado la suspensión de la autorización de seguridad de Ariane Tabatabai el año pasado debido a su papel en una operación de inteligencia iraní. «Sorprendentemente, ella todavía está en el trabajo», escribió, añadiendo que «la última filtración aparente a un canal de Telegram iraní refleja la tolerancia de la administración Biden-Harris hacia las amenazas internas».
La carta también enfatizó la necesidad de respuestas del Pentágono antes del 6 de octubre, solicitando detalles sobre la autorización de seguridad (pasaporte) de Tabatabai, sus contactos con funcionarios iraníes y si tenía acceso a programas de acceso especial (SAP). Los problemas que rodean a Tabatabai no son nuevos; en 2021, disidentes iraníes sugirieron que tenía un largo historial de repetir la retórica del régimen iraní. En ese momento, varios miembros de la Cámara de Representantes pidieron una revisión de su autorización de seguridad, que la administración Biden rechazó, calificándola de «calumniosa y difamatoria».
Sin embargo, nuevas acusaciones sugieren que los lazos de Tabatabai con el régimen iraní pueden haber sido más profundos de lo que incluso sus críticos más feroces imaginaron. «El hecho de que el Departamento de Defensa inicialmente defendiera fuertemente a Tabatabai sin considerar cuidadosamente si se había violado la seguridad nacional causó más reacciones», afirmaron los senadores.
Los senadores instaron a Lloyd Austin a suspender de inmediato la autorización de seguridad de Tabatabai y exigieron saber si se había sometido a controles de contrainteligencia, como pruebas de verdad, y si su autorización se revisaba periódicamente. Cabe señalar, sin embargo, que hasta ahora no ha habido confirmación oficial de que Tabatabai esté siendo buscada o investigada por las autoridades como parte de la investigación sobre la filtración.
El perfil de la presunta filtradora de los documentos
Ariane Tabatabai es una politóloga, autora y asesora principal de políticas iraní-estadounidense en el Departamento de Defensa de los Estados Unidos. Se graduó del King’s College de Londres y es hija de Javad Tabatabai, un filósofo iraní y profesor de la Universidad de Teherán. Además, es miembro de la facultad de la Universidad de Teherán.
Tabatabai también ha sido investigadora en el grupo de expertos RAND Corporation, directora del plan de estudios y profesora asociada de estudios de seguridad en la Universidad de Georgetown. Asimismo, ha ejercido como asesora política internacional de la OTAN y ha estado involucrada en varios proyectos de investigación.
En un artículo publicado en la revista Foreign Policy antes de las elecciones presidenciales estadounidenses de 2020, Tabatabai argumentó que la economía de Irán es frágil y se verá obligada a negociar, acordar y hacer concesiones. En su análisis, exigió que el candidato presidencial estadounidense ganador no regresara al acuerdo nuclear y presionara por más puntos.
Tras asumir su cargo en la administración Biden en enero de 2021, se unió al equipo negociador de EE. UU. en las conversaciones nucleares con Irán. Sin embargo, junto con Richard Nephew, abandonó el equipo después de unos meses debido a desacuerdos con Robert Malley, el jefe del equipo negociador de EE. UU. Tabatabai también expresó su preocupación de que EE. UU. levantara demasiadas sanciones a Irán, lo que haría que el posible acuerdo no fuera lo suficientemente sólido.
Posturas polémicas en Oriente Medio
Después de que Tabatabai fuera nombrada para su puesto en el Departamento de Estado de Estados Unidos, se convirtió en blanco de acusaciones en las redes sociales. Estas acusaciones aparecieron por primera vez en Twitter, acusándola de rendirse a la República Islámica de Irán.
En septiembre de 2023, una gran cantidad de correspondencia y correos electrónicos del gobierno iraní, reportados inicialmente por Semafor e Iran International, vincularon a Tabatabai con la Iniciativa de Expertos en Irán. Este esfuerzo fue lanzado por altos funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores iraní para reforzar la imagen y las posiciones de Teherán en cuestiones de seguridad global, particularmente en relación con su programa nuclear. Se reveló que Tabatabai se reunía periódicamente con altos funcionarios iraníes, y Iran International afirmó que su informe fue una revelación y una sorpresa para el Pentágono.
En uno de los correos electrónicos filtrados, Tabatabai escribió a su contacto en el Ministerio de Relaciones Exteriores iraní pidiendo consejo sobre si debería trabajar con funcionarios en Arabia Saudita y asistir a una reunión en Israel. Su contacto le sugirió que considerara a Arabia Saudita y evitara Israel. Mientras tanto, el FBI informó que está investigando la filtración de dos documentos de inteligencia de alto secreto que describen los preparativos de Israel para tomar represalias contra Irán.
El portavoz de la Casa Blanca, John Kirby, comentó que aún no se ha determinado si la divulgación fue el resultado de un hackeo o una filtración, y que Joe Biden está monitoreando de cerca los resultados de la investigación. «No estamos exactamente seguros de cómo estos documentos se hicieron públicos», dijo a los periodistas. «El presidente sigue profundamente preocupado por cualquier filtración de información clasificada de dominio público. Esto no debería suceder y es inaceptable cuando ocurre.» El portavoz también subrayó que el presidente Biden está «profundamente preocupado» por la filtración, pero que todavía no se ha determinado si se trata de un hackeo o una filtración interna.
Los presuntos ataques contra Irán que Israel pretendería llevar a cabo
Según se informa, los documentos describen los preparativos de Israel para un ataque contra Irán, basándose en información recopilada por la Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial de EE.UU. el 15 y 16 de octubre. La filtración de estos documentos representa un grave problema de seguridad nacional, ya que revelan detalles críticos sobre los planes de Israel para atacar a Irán, lo que podría conducir a una escalada de tensiones en Oriente Medio.
Los analistas militares que han revisado los documentos indican que el lenguaje y los encabezados utilizados son consistentes con documentos clasificados similares que se han divulgado en el pasado. Los documentos están marcados como «Top Secret» y llevan el acrónimo «FGI», que significa «Inteligencia de Gobiernos Extranjeros».
Además, los documentos parecen haber sido distribuidos a las agencias de inteligencia de la alianza «Cinco Ojos», que incluye a Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. El acrónimo «TK» que aparece en los documentos hace referencia al término «Talent Keyhole», un código que abarca la información derivada de satélites relacionada con los servicios de Inteligencia de Señales (SIGINT) e Inteligencia de Imágenes (IMINT).
Los documentos presentan una evaluación exhaustiva de la inteligencia estadounidense sobre los preparativos de Israel para atacar a Irán, basada en información recopilada el 15 y 16 de octubre por la NGA. Uno de los principales puntos de interés es la referencia a dos sistemas de misiles balísticos aire-tierra (ABLM): el Golden Horizon y el Rocks. El sistema Rocks es un misil de largo alcance fabricado por la empresa israelí Rafael que puede alcanzar objetivos tanto por encima como por debajo del suelo, mientras que el Horizonte Dorado parece referirse al sistema Gorrión Azul, con un alcance de unos 2,000 kilómetros.
Este informe sugiere que la fuerza aérea israelí tiene la intención de llevar a cabo un ataque generalizado, similar al que ejecutó en abril contra un radar iraní cerca de Isfahán. Al lanzar los misiles desde una larga distancia, Israel podría evitar tener que volar sobre países vecinos como Jordania. Sin embargo, los documentos no incluyen ninguna indicación de que Israel tenga la intención de activar su arsenal nuclear. Como señala la BBC, a petición de Israel, el gobierno de EE.UU. nunca reconoce públicamente que su estrecho aliado Israel tiene armas nucleares, lo que ha causado cierta incomodidad en Washington.
El contenido de los documentos
A pesar de las revelaciones, los documentos no contienen detalles sobre los objetivos que Israel tiene la intención de atacar ni sobre el momento del ataque. El gobierno de Estados Unidos ha expresado su oposición a los ataques contra instalaciones nucleares iraníes o infraestructura petrolera, lo que deja a las bases militares iraníes, en particular las pertenecientes a la Guardia de la Revolución Islámica (IRGC) y la fuerza Basij, como los objetivos más probables.
Al mismo tiempo, la demora del ataque por parte de Israel es notable. Muchos esperaban que el ataque ya se hubiera producido, especialmente después de la promesa de Israel de tomar represalias contra Irán. Sin embargo, al igual que en abril, cuando Irán respondió con un ataque de 300 aviones no tripulados y misiles tras un ataque israelí contra Damasco, Israel parece estar procediendo con cautela. Esta precaución puede deberse a las preocupaciones de EE.UU. sobre la escalada justo antes de las elecciones presidenciales de noviembre.
