La Unión Europea no considera que una guerra sea inminente, pero reconoce que la amenaza ya no es una mera fantasía. Por ello, Josep Borrell insta a los Estados miembros a invertir conjuntamente en Defensa, especialmente en el contexto de la invasión rusa en Ucrania y ante la incertidumbre política en Estados Unidos, donde podría regresar Donald Trump a la Casa Blanca. Estas reflexiones las compartió el Alto Representante en un evento de Nueva Economía Fórum celebrado este martes en Bruselas.
Una escalada de tensión
Aunque Borrell no ve una guerra a gran escala como un peligro inminente, reconoce que es una posibilidad que no puede descartarse. «Tenemos que hacer todo lo posible para evitarla, pero para disuadir a un adversario necesitamos tener los medios«, afirmó. Además, subrayó la necesidad de que la UE asuma su responsabilidad en materia de seguridad, ya que un eventual retorno de Trump al poder podría reducir el paraguas de protección proporcionado por la OTAN.
La Unión Europea debe funcionar como un Estado
En este sentido, Borrell ha insistido en la importancia de soluciones comunes en Defensa, enfocándose en la reactivación de la industria más que en aspectos militares, que son competencia de los Estados miembros. Para el jefe de la diplomacia europea, estos avances representan un paso hacia la integración y no entran en conflicto con el papel de la OTAN, que debe mantener su respaldo a Ucrania frente a las acciones de Putin.
La estrategia de Defensa de la UE se integra en un plan industrial que forma parte de su objetivo de alcanzar autonomía estratégica a medio plazo. Este enfoque no solo tiene como objetivo disuadir a Vladimir Putin, sino también prepararse para posibles escenarios en Estados Unidos, incluida una eventual vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca. Europa busca tener el control sobre su propia seguridad, enfocándose en la toma de decisiones internas.
Más financiación para Defensa
Para lograr estos avances, es necesario disponer de fondos adecuados. Borrell aboga por herramientas comunes de financiación de la Defensa y señala que los Estados miembros deben comprometerse con la financiación de la Agencia Europea de Defensa. En cuanto a la posible creación de un fondo conjunto, todavía está en proceso de desarrollo: «la OTAN no va a ser creíble si los socios europeos no aumentan su credibilidad, esta es la mejor lección que debemos extraer de Ucrania«.