EEUU media entre Israel y Hamás para que acepten un plan de alto el fuego

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden. MICHAEL REYNOLDS / POOL

El viernes pasado, el presidente de Estados Unidos Joe Biden presentó una propuesta de alto el fuego en tres fases.

La primera se realizaría en un periodo de seis semanas, e impondría un alto el fuego temporal, durante el cual se produciría un intercambio de cientos de presos palestinos por los rehenes israelíes más vulnerables retenidos en Gaza desde los atentados del 7 de octubre: mujeres, ancianos, heridos y enfermos. Además, la ayuda humanitaria se multiplicaría para llegar a 600 camiones diarios y los refugiados palestinos en la Franja podrían regresar a lo que quede de sus hogares.  

La segunda fase incluiría la liberación de todos los rehenes vivos restantes, incluyendo militares, y el Ejército israelí se retiraría de la Franja de Gaza. Finalmente, en a tercera parte de esta ‘hoja de ruta’ se contempla “un importante plan de reconstrucción para Gaza”.

Presión internacional

Tras el anuncio de Biden, las autoridades de Estados Unidos, Egipto y Qatar instaron al Gobierno de Israel y a Hamás a trabajar para alcanzar un acuerdo. También lo hicieron países como España o Francia a través de mensajes en redes sociales.

«Como mediadores en las discusiones en curso para asegurar un alto el fuego en Gaza y la liberación de rehenes y detenidos, Estados Unidos, Egipto y Qatar piden conjuntamente tanto a Hamás como a Israel que finalicen el acuerdo que incorpora los principios esbozados por el presidente Biden el 31 de mayo de 2024», reza una declaración conjunta compartida por el Departamento de Estado de EEUU.

«España apoya la propuesta del presidente Biden para poner fin a la guerra en Gaza. Es urgente un alto el fuego que acabe con la catástrofe humanitaria, así como la liberación inmediata de todos los rehenes. Solo la aplicación de la solución de los dos Estados posibilitará un futuro de paz, seguridad y prosperidad para la región», escribió Pedro Sánchez en X.

Israel dice que “no es un buen acuerdo”

En un primer momento, Netanyahu parecía desmentir a Biden, el líder que más le ha apoyado a lo largo de los ocho meses de guerra, y le replicaba que su país no puede aceptar un fin de las hostilidades hasta que Hamás no quede destruido.

Pero este domingo, el asesor de política internacional del primer ministro afirmó que Israel acepta el acuerdo, aunque no considera que sea bueno para Israel y que quedan “muchos detalles por resolver”. Por su parte, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, insistió en que su Gobierno no aceptará que Hamás continúe al frente de Gaza en ninguna etapa del proceso y estudia alternativas al grupo fundamentalista.

“Es una propuesta israelí, una a la que llegaron tras una intensa diplomacia con su equipo de seguridad nacional y en el Departamento de Estado”, insistió Kirby. “En lo que estamos ahora es que esa propuesta se ha transmitido a Hamás. Se hizo el jueves por la noche, hora nuestra. Estamos esperando una respuesta oficial de Hamás. Hacemos notar que públicamente altos cargos de Hamás han salido a dar la bienvenida a esta propuesta”.

Por su parte, Hamás respondió positivamente a la propuesta a través de un comunicado y aseguró que está dispuesto a negociarla. De hecho, el grupo islamista palestino lleva días insistiendo en que está preparado para alcanzar un acuerdo de liberación, siempre y cuando Israel ponga fin a la guerra en Gaza. En su mensaje, deja claro sus requisitos y que no han cambiado; la retirada total de las fuerzas israelíes del enclave, el retorno de los palestinos desplazados a sus hogares y la reconstrucción de Gaza.