Juana Rivas en una imagen de archivo EFE/ JORGE ORTIZ
El Tribunal Supremo de Italia ha ordenado la repetición del juicio civil sobre la custodia de los hijos de Francesco Arcuri y Juana Rivas, la vecina de Maracena que fue condenada en España por sustracción de menores. La Corte italiana entiende que se vulneraron el interés superior de los menores y varios convenios internacionales.
Los niños eran entonces menores de edad y la sentencia implicaba que cada uno de ellos estuviera en un país distinto. El mayor, en España, y el menor, en Italia. A Juana Rivas se le negó la custodia de su hijo menor, que es el que vive con su padre en Italia, y la del hijo mayor se le fue concedida definitivamente en marzo de 2023.
Ahora, la justicia italiana considera que esa separación no era razonable porque, entre otras cuestiones, el juzgado no consideró en toda su profundidad las implicaciones de “la interrupción del vínculo” entre los hermanos. La sentencia resalta, además, que en el procedimiento judicial se dejaron de aplicar normas internacionales básicas por parte del tribunal de Cagliari.
Asimismo, teniendo en cuenta la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, la resolución insiste en una idea fundamental. En el proceso llevado a cabo en la Corte de Apelación de Cagliari ha faltado un análisis en profundidad sobre el interés superior de los niños, que representa el criterio fundamental sobre el que se ha de basar toda decisión sobre la custodia.
El caso Juana Rivas
El verano de 2016, Juana Rivas no llevó de vuelta a sus dos hijos menores a Italia, con su padre, Francesco Arcuri. Hasta unos meses antes, Rivas, Arcuri y los niños convivían en Carloforte, al sur de Cerdeña. En mayo de ese año, Rivas trajo a los niños a España a pasar unos días y ya no volvieron con su padre.
Tres resoluciones judiciales después y un mes en el que los niños estuvieron desaparecidos con la madre, en septiembre de 2017, el progenitor recuperó a los hijos y se fue con ellos a Italia.
Juana Rivas fue condenada a cinco años de prisión por dos delitos de sustracción de menores, aunque el Tribunal Supremo de España estimó parcialmente el recurso de esta vecina de Maracena y le rebajó la pena a la mitad al considerar que, aunque fueron dos los menores sustraídos, cometió un único delito.
Esta lucha en los juzgados italianos comenzó en octubre de 2016 y tuvo una primera resolución en 2019, que otorgaba a Arcuri la custodia de los dos menores. El año pasado, después del recurso de los abogados de Rivas se otorgó la custodia de cada niño a cada uno de los padres. Esa es la sentencia que ahora el Supremo italiano quiere que se analice de nuevo.