La Comunidad de Madrid ha manifestado su oposición a la propuesta del Gobierno central de condonar parte de la deuda de Cataluña. La consejera de Economía, Hacienda y Empleo, Rocío Albert, ha calificado esta medida como un acuerdo político que penaliza a las regiones que han mantenido una gestión fiscal responsable.
Durante su intervención en el V Observatorio de Finanzas organizado por El Español en la Universidad Camilo José Cela, Albert criticó que esta iniciativa generará un impacto económico desigual entre comunidades autónomas, beneficiando a unas en detrimento de otras. “Cada madrileño asumirá 483 euros adicionales de deuda, mientras que cada ciudadano catalán verá reducida su carga en 410 euros. Esto supone un agravio para aquellos territorios que han administrado sus cuentas con responsabilidad”, afirmó la consejera.
Un mensaje negativo para la economía
Según Albert, la condonación de deuda a Cataluña envía una señal errónea tanto a nivel nacional como internacional sobre la seriedad en la gestión económica del país. Argumentó que esta decisión fomenta la irresponsabilidad presupuestaria y podría afectar la credibilidad de España en los mercados financieros. “Cuando se premia el endeudamiento sin control y se penaliza la eficiencia en la gestión, los inversores perciben un aumento del riesgo, lo que inevitablemente encarece la financiación pública”, explicó.
La Comunidad de Madrid ha defendido históricamente un modelo económico basado en la estabilidad fiscal, la baja presión impositiva y la eficiencia en el gasto público. Desde el Ejecutivo regional se considera que la condonación de deuda a una comunidad en particular, sin aplicar un criterio general para todas, representa un trato discriminatorio que perjudica a los ciudadanos de otras regiones.
Consecuencias a largo plazo
Albert también advirtió que esta medida puede sentar un precedente peligroso, incentivando a otras autonomías a endeudarse sin preocuparse por las consecuencias futuras. “Si el mensaje es que, tarde o temprano, la deuda será perdonada por el Estado, muchas comunidades podrían optar por una gestión más laxa de sus recursos, con la expectativa de recibir el mismo trato en el futuro”, señaló.
El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha insistido en la necesidad de aplicar políticas que fomenten la responsabilidad fiscal y que eviten generar agravios comparativos entre territorios. En este sentido, Albert reiteró que la región seguirá defendiendo un modelo basado en la eficiencia y la sostenibilidad financiera.
De esta manera, la Comunidad de Madrid se posiciona como uno de los principales opositores a la condonación parcial de la deuda de Cataluña, al considerar que genera desigualdad entre comunidades y compromete la estabilidad económica del país.