Francina Armengol, presidenta del Congreso de los Diputados y secretaria general del Partido Socialista de las Islas Baleares, dejó de lado su rol institucional durante su intervención en el Consejo Político del PSOE en Baleares, asumiendo un tono más propio de una líder partidista. En su discurso, lanzó duras críticas contra el Partido Popular (PP), acusándolo de anteponer su deseo de «derrocar al Gobierno de España» a los intereses de las comunidades autónomas.
Armengol defendió la senda del déficit, argumentando que esta medida permitiría destinar «6.800 millones de euros para las comunidades autónomas y 5.000 millones para los ayuntamientos» en los años 2025 y 2026. Cuestionó cómo el PP podría votar en contra de una iniciativa que, según ella, beneficiaría a las regiones. “¿Cómo es posible que el PP, por su interés de ir contra el gobierno de Pedro Sánchez, vaya a votar en contra?”, preguntó la presidenta, señalando que el PP solo busca bloquear al Gobierno.
La líder socialista también rechazó los ataques del PP a su gestión fiscal, asegurando que «quien rompe España es el que solo mira su ombligo olvidando a los ciudadanos que tiene que representar». Añadió que pedir más dinero para «condonar impuestos a los más ricos» es un despropósito, ya que «estás obviando la clase media y trabajadora de tu autonomía».
Además, Armengol abordó la importancia de la corresponsabilidad fiscal, subrayando que comunidades como Baleares y Cataluña han sido siempre solidarias con el resto de España. «Queremos recaudar aquí y luego ser solidarios como hemos sido siempre con el resto de España», afirmó, en defensa de la autonomía fiscal de estas regiones.
En otro momento de su intervención, Armengol respaldó las palabras del presidente Pedro Sánchez, quien había tildado al PP como «la peor oposición de la historia democrática». Expresó que mientras los socialistas están enfocados en «cómo mejorar la vida de la gente», el PP solo se preocupa por sus propios intereses. Armengol reiteró su preocupación por un modelo de sociedad donde no se garantice la igualdad de oportunidades, afirmando que «si queremos garantizar la igualdad de oportunidades a todos los ciudadanos tenemos que tener gobiernos autonómicos que hagan posible que esos ciudadanos tengan las mismas posibilidades».
Finalmente, la presidenta cerró su intervención hablando del sistema de redistribución de la riqueza y la necesidad de un debate sobre cómo se distribuyen los recursos. «Se trata de redistribuir bien la riqueza y se trata de hablar de los dos debates: de qué recibes y cómo lo gastas», concluyó, reforzando la importancia de un sistema de financiación autonómico justo y equitativo para todas las comunidades.