El Congreso de los Diputados conmemora hoy el 46 aniversario de la Constitución española en un acto marcado por la reciente reforma del artículo 49 y las tensiones políticas derivadas de la aprobación de la Ley de Amnistía hace seis meses. La norma, que exime de responsabilidad a los involucrados en el «procés» catalán de 2017, sigue siendo motivo de controversia, especialmente por sus implicaciones en el principio de igualdad ante la ley.
El acto comenzó a las 10:30 horas con el izado solemne de la bandera en la Carrera de San Jerónimo, organizado por el Estado Mayor de la Defensa . La presidenta del Congreso, Francina Armengol, y el presidente del Senado, Pedro Rollán, encabezaron la ceremonia, acompañados por el almirante general Teodoro Esteban López Calderón, Jefe de Estado Mayor de la Defensa. Posteriormente, los líderes de las principales instituciones se dirigieron al Salón de los Pasos Perdidos para el acto central.
El foco de la celebración estuvo en la reforma del artículo 49, aprobada el pasado enero, que eliminó el término «disminuido» en referencia a las personas con discapacidad. Representantes de colectivos de discapacidad participaron activamente, leyendo el nuevo texto en diversos formatos accesibles, como braille, lengua de signos y lectoescritura. La Agrupación Musical Inclusiva del Teatro Real acompañó la ceremonia con dos piezas musicales.
El evento también estuvo marcado por las críticas y ausencias relacionadas con la Ley de Amnistía, aprobada en mayo para anular los delitos relacionados con el referéndum del 1 de octubre de 2017. Esta ley, clave para que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, asegurara el respaldo de los partidos independentistas y nacionalistas, sigue generando divisiones. Mientras su aplicación beneficia a numerosos implicados, la figura de Carles Puigdemont, expresidente catalán huido, queda fuera de su alcance.
La constitucionalidad de la norma está actualmente bajo el escrutinio del Tribunal Constitucional, que debe resolver los recursos presentados. Para muchos, esta ley simboliza una amenaza al principio de igualdad que consagra la Constitución, intensificado por acuerdos como el «cupo catalán» pactado entre el PSOE y ERC.
Ausencias destacadas
Como en ediciones anteriores, Vox y los socios independentistas del Gobierno no asistieron al acto principal. Vox, que califica la celebración como «hipocresía patrocinada», solo participó en el izado de bandera. Por su parte, ERC, Junts, Bildu, PNV y BNG reiteraron su habitual ausencia en los actos institucionales del Congreso y el Rey, optando por organizar eventos alternativos. El PNV, por ejemplo, celebró un acto en Bilbao para reivindicar su abstención en el referéndum constitucional de 1978.
En contraste, Podemos y Sumar sí enviaron representación. Aunque la vicepresidenta Yolanda Díaz no estuvo presente debido a un viaje oficial, el ministro de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, participó en la recepción oficial.