El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares Jesús Hellín – Europa Press
La primera reacción del Gobierno a los resultados electorales en Venezuela ha llegado de la mano del ministro de Exteriores José Manuel Albares, quien ha pedido este lunes “que se publiquen todas las actas mesa por mesa» y que “sean verificadas”, como “garantía mínima” para reconocer el resultado.
Las declaraciones de Albares se han producido horas después de que el Consejo Nacional Electoral venezolano otorgara un 51,2% de los votos a Nicolás Maduro frente al 44,2% de la principal candidatura opositora, liderada por Edmundo González Urrutia. La oposición habla de “fraude” y “saqueo masivo”.
“Pedimos que haya una transparencia total para que se puedan certificar esos datos”, ha asegurado Albares en declaraciones a la Cadena SER, recogidas por elDiario.es, que ha explicado que estamos “en un momento muy incipiente del conteo” y ha insistido en que debe contarse “cada voto”. “Esperamos que a lo largo del día vayamos teniendo una información más completa”.
También en X, Albares ha pedido la presentación de las actas de todas las mesas electorales “para garantizar resultados plenamente verificables”. “Pedimos que se mantenga la calma y el civismo con los que transcurrió la jornada electoral”, ha añadido.
El ministro ha pedido “que se mantenga la calma, la tranquilidad y el sentido democrático que prevaleció en la jornada electoral”. Para ello, el ministro ha explicado que el Gobierno español está en contacto con “los países hermanos” de la zona.
Posibles irregularidades
La oposición al Gobierno de Maduro ha denunciado que el Consejo Nacional Electoral (CNE) dejó de transmitir las actas desde los colegios electorales de votación y que impedía a los testigos el acceso a ellas. La antichavista Delsa Solorzano, líder del partido Encuentro Ciudadano, explicó que, al no estar presentes en la sede del CNE, no pueden canalizar “en tiempo real” las incidencias que reciben durante el desarrollo del proceso con los rectores de la institución, por lo que -señaló- dependen de un “intermediario” o de comunicaciones vía celular para atender y resolver los casos.
Se suponía que, como estaba previsto, las urnas cerrarían a las 6 p.m., pero en algunos de los más de 15.000 centros de votación que fueron habilitados en Venezuela, más de una hora después de la hora límite, algunos centros permanecieron abiertos y las autoridades guardaron silencio.