Imagen: ministro de Economía, Carlos Cuerpo
La aprobación del impuesto al diésel se ha convertido en una condición clave para que España reciba el quinto pago del Plan de Recuperación, que asciende a casi 25.000 millones de euros. El plazo para que la Comisión Europea evalúe el cumplimiento de los objetivos concluye el 21 de marzo. En este contexto, el secretario de Estado de Economía, Carlos Cuerpo, ha manifestado su confianza en lograr la aprobación de la medida antes de esa fecha. “Lo antes posible”, enfatizó en una rueda de prensa tras el Ecofin, con el objetivo de evitar un pago parcial por parte de Bruselas.
Un horizonte complicado
El impuesto al diésel forma parte de los hitos incluidos en el Plan de Recuperación. Según Cuerpo, el Gobierno está trabajando simultáneamente en otros compromisos relacionados con el quinto desembolso. “Estamos avanzando en los hitos pendientes, incluyendo el impuesto sobre hidrocarburos”, explicó, subrayando que esta medida está alineada con los objetivos de política fiscal acordados con Bruselas.
Luz verde a la adenda del Plan de Recuperación
El Ecofin aprobó este martes la revisión del Plan de Recuperación presentada por España en noviembre. Este paso permite anticipar 55 hitos y objetivos de tramos posteriores, ampliando el quinto desembolso a 84 medidas y un total de 25.000 millones de euros, que incluyen 9.100 millones en fondos Next Generation y 16.000 millones en préstamos favorables. La Comisión Europea tiene ahora hasta el 21 de marzo para evaluar la solicitud de pago y verificar el cumplimiento de las condiciones, entre ellas la entrada en vigor del impuesto al diésel.
Obstáculos parlamentarios
El Gobierno enfrenta una ardua tarea para sacar adelante el impuesto al diésel, debido a las dificultades de obtener apoyo parlamentario. Podemos condiciona su respaldo a la aprobación del impuesto permanente a las energéticas, una medida que, a su vez, rechazan PNV y Junts. Además, Junts ha anunciado que no apoyará ninguna iniciativa del Ejecutivo al considerar incumplidos los acuerdos de investidura, como la oficialidad del catalán en la UE y la ley de amnistía. Este escenario complica las opciones del Gobierno, que intentará nuevamente aprobar la medida en el Congreso.
Reformas fiscales exigidas por Bruselas
El texto revisado del hito 388 del Plan de Recuperación destaca la entrada en vigor de reformas fiscales basadas en las recomendaciones del Comité de expertos y del Ministerio de Hacienda. Entre ellas, se incluyen ajustes en la Fiscalidad Medioambiental, el Impuesto sobre Sociedades, el Impuesto sobre el Patrimonio y el IRPF, además del aumento del impuesto sobre el gasóleo. Estas medidas, según un portavoz de la Comisión Europea, podrían incrementar los ingresos fiscales en al menos 0,3 puntos porcentuales del PIB.
Reforma fiscal: un tira y afloja constante
La reforma fiscal ha sido motivo de tensiones entre el Gobierno español y la Comisión Europea. Bruselas ha instado en varias ocasiones a modernizar el sistema tributario, proponiendo subidas del IVA y de impuestos medioambientales. Aunque el Ejecutivo español consideraba la reforma fiscal completada, finalmente accedió a incluir medidas adicionales para cumplir con lo pactado. La aprobación del impuesto al diésel es uno de los últimos escollos para garantizar el desembolso total de los fondos europeos.