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Como viene un clásico los toros de la ganadería sevillana Miura protagonizan el último de los encierros. También como viene siendo habitual estos toros caracterizados por su carácter bravo y su fuerza dan una carrera rápida y peligrosa.
Una carrera más concurrida de los habitual
Los toros de Miura ponen punto y final a los encierros de los Sanfermines de 2024 este domingo con una carrera caracterizada por la tensión y el peligro en la que los astados arrollaron a varios corredores, 6 de los cuales han sido traslados al Hospital Universitario de Navarra con contusiones.
Los seis toros sevillanos han completado el recorrido en 2 minutos y 22 segundos, en un último encierro multitudinario que coincidió en domingo, con la ciudad plagada de visitantes tanto nacionales como extranjeros. Conscientes de que era la última carrera de los Sanfermines, las despedidas se han sucedido desde antes de que el portón de los corrales de Santo Domingo se abrieran por última vez hasta el año que viene.
A las 8 de la mañana sonó el último cohete del 2024 abriéndose los corrales. En este primer tramo la manada se ha estirado recorriendo en línea recta la cuesta de Santo Domingo, mientras sobrepasaban por milímetros a decenas de mozos. Posteriormente, los astados llegaron en dirección a la plaza del ayuntamiento pamplonica, que ha cruzado separada, al igual que la calle Mercaderes, donde se han podido bonitas pero peligrosas carreras. Justo a su salida, un toro se ha llevado por delante a un corredor.
La curva de Estafeta otro punto tensionado
Entrando en la curva de Estafeta, un toro ha saltado contra la pared y se ha llevado por delante a un corredor, que fue rescatado rápidamente por otros mozos . Este punto ha sido superado por los astados a gran velocidad y han dejado momentos peligro porque varios mozos que se encontraban en la zona también han sido arrollados.
En esta calle la manada, se disipó aun más dejando bonitos planos de los toros corriendo por el centro de la calzada y abriendo huecos que han permitido lucirse a los corredores. A pesar de ellos, varios mozos son arrollados, el grupo se ha estirado, llegando a separarse varios metros por el tropiezo de uno de los astados, lo que ha permitido a los mozos encontrar huecos para lucirse delante de los toros.
De esta manera han completado el recorrido, con los castaños y un cárdeno en el primer grupo, y los otros tres toros, en fila, de uno en uno, hasta que han llegado a la Plaza. En la entrada al callejón, varios corredores han caído al suelo, sin llegar a llamar la atención de ningún Miura. Ya en la plaza los astados han entrado en corrales sin más problema
