Òmnium Cultural ha expresado su descontento ante la posible investidura de Salvador Illa, del Partido Socialista, lo cual implicaría la pérdida de un gobierno independentista en Cataluña. La entidad soberanista atribuye esta situación al enfrentamiento «fratricida» entre los partidos del procés y ha asegurado que apoyará al expresidente Carles Puigdemont en su esperado regreso a Cataluña.
El expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que mantiene su intención de regresar a Cataluña a pesar de la orden de detención nacional en su contra por las causas del ‘procés’, asistió a un acto de apoyo de su partido Junts per Catalunya (JxCat) en Banys i Palaldà, Francia. El acto tuvo lugar el sábado pasado y contó con una significativa presencia de partidarios.
Òmnium Cultural ha divulgado un comunicado en el que lamenta la pérdida de una presidencia y un gobierno independentista con la investidura de Illa. La entidad destaca que «Salvador Illa no era ni es la opción de Òmnium Cultural» y lamenta que la presidencia de la Generalitat pueda quedar en manos de un partido que, según ellos, se aparta del «amplio consenso social» que respalda el derecho a la autodeterminación.
Con la anunciada vuelta de Puigdemont a España para asistir al debate de investidura en el Parlament, Òmnium ha prometido estar «a su lado» y defender «la honorabilidad de la presidencia de la Generalitat que él representa». La entidad considera que la posibilidad de que Puigdemont sea detenido, a pesar de la aprobación de la ley de amnistía, es «un hecho gravísimo que pondría de manifiesto la rebelión del poder judicial ante una ley democrática aprobada parlamentariamente por el poder legislativo».
Òmnium subraya que «defender el regreso y la libertad del president Puigdemont es defender la legitimidad de la causa en defensa de los derechos y las libertades de Cataluña». La organización reconoce que la pérdida de un gobierno independentista es una «mala noticia» y que no es fruto del azar, sino consecuencia de la falta de acuerdos estratégicos dentro del movimiento independentista, lo que ha consolidado un escenario fratricida desde 2019.
La entidad admite que todos los involucrados, incluida Òmnium, deben asumir su «inexcusable responsabilidad» por la incapacidad de traducir la «mayoría cívica y social» a favor del derecho a la autodeterminación y la independencia en una mayoría parlamentaria desde las elecciones del 12 de mayo.
No obstante, Òmnium resalta que «existe país más allá del Govern» y se compromete, desde su papel como sociedad civil, a no perder tiempo en reproches estériles y a seguir trabajando por la lengua, la cultura, la cohesión social y la independencia de Cataluña. La entidad ha asegurado que «continuaremos esforzándonos, desde la sociedad civil, sin desfallecer ni claudicar, para vertebrar las mayorías necesarias para defender colectivamente estos objetivos, en los que se juega nuestra supervivencia como pueblo, para tener una mayoría cívica y social que nos permita recuperar la hegemonía también en el ámbito político e institucional».
Finalmente, Òmnium promete ser «extremadamente exigentes y críticos» con las instituciones catalanas en todo lo que afecte a la lengua catalana, la cultura y la cohesión social, reafirmando su compromiso con los objetivos soberanistas y la defensa de los derechos y libertades de Cataluña.
