El pasado 29 de octubre las fuertes lluvias provocadas por la DANA arrasaron hasta dieciséis municipios de la provincia de Valencia. La AEMET, Agencia Estatal de Meteorología mandó varios avisos de las fuertes riadas cuando estaban teniendo lugar.
Mientras las fuertes lluvias destruían varios municipios, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su esposa, Begoña Gómez, estaban cenando en un restaurante de Bombay. La cena no formaba parte de ningún acto oficial o reunión, sino que era totalmente de “carácter privado”, pues no consta en la agenda oficial del 29 de octubre.
La cena de Sánchez y su mujer en Bombay coincide en horario con el criticado almuerzo del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, con la periodista Maribel Vilaplana, en un restaurante de Valencia. En aquel momento no se había lanzado la alerta masiva a los móviles en las zonas afectadas, pero el Ejecutivo valenciano sí que había activado el Centro de Coordinación Operativo Integrado para seguir la evolución de la DANA.
Pedro Sánchez compareció ante los medios de comunicación en Bombay después de las 15.45 de la tarde, hora española. En la ciudad india eran las 20.15 horas al inicio de la comparecencia pública, por lo que el jefe del Ejecutivo se fue con su mujer tras despedirse de los medios de comunicación al filo de las nueve de la noche, hora local. Tuvieron tres horas de agenda privada en Bombay para dar un paseo y cenar juntos lejos de las cámaras.
Sánchez tardó casi una semana en visitar Paiporta tras la riada
El presidente del Gobierno estuvo informado durante de la evolución de la DANA durante su estancia en Bombay. Durante su viaje de vuelta a España hizo una parada técnica de más de una hora en Omán para repostar el avión, cuando era de madrigada en España. Tras llegar a la base aérea de Torrejón de Ardoz, poco antes de las once de la mañana. A esta hora ya se conocía que las fuertes lluvias y la riada habían causado 51 fallecidos.
El mismo 29 de octubre Sánchez publicó un mensaje en su cuenta persona del “X” en el que señalaba que estaba “siguiendo de cerca y con preocupación las informaciones sobre las personas desaparecidas y los daños causados por la DANA en las últimas horas”. Aun así, el presidente del Gobierno tardó casi una semana en visitar Paiporta y Valencia, donde fue recibido entre gritos de “dimisión” y lanzamientos de barro contra él. A los pocos segundos de que los valencianos lanzan el fango contra la comitiva, abandonó el lugar acompañado de sus escoltas.