El juez ha decidido imputar provisionalmente por asesinato al autor del homicidio de Mateo, un niño de 11 años que fue apuñalado mientras jugaba al fútbol en un polideportivo local. Tras pasar a disposición judicial, se ha decretado para el acusado prisión provisional comunicada sin fianza, según han informado fuentes jurídicas.
Desde el trágico incidente ocurrido el pasado domingo 18 de agosto, la Guardia Civil ha desplegado un amplio dispositivo de investigación. Entre las acciones realizadas, destaca el hallazgo de un cuchillo en un descampado cercano a la vivienda del detenido, el cual se presume que podría ser el arma utilizada en el crimen. Un perro del Servicio Cinológico de la Guardia Civil marcó positivo en restos biológicos humanos en el cuchillo encontrado, reforzando la posibilidad de que se trate del arma homicida.
El detenido, un joven de 20 años, fue trasladado este jueves a los juzgados de Toledo en un furgón del Instituto Armado, donde compareció ante el Juzgado de Instrucción número 3, responsable de las diligencias previas. Este juzgado ha levantado el secreto de sumario y ha pedido un informe al médico forense antes de la toma de declaración del acusado.
El resultado de dicho informe ha determinado la necesidad de realizar el interrogatorio con adaptaciones a la situación de discapacidad del investigado, en cumplimiento del artículo 109 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim). Para facilitar la comunicación, se nombró a una facilitadora que asistió al acusado durante su declaración.
Además, el juez ha solicitado un dictamen forense sobre la imputabilidad del investigado, el cual deberá realizarse durante la instrucción del procedimiento judicial. Este análisis es fundamental para determinar si el acusado estaba en pleno uso de sus facultades mentales en el momento del crimen y, por tanto, si es imputable por el delito de asesinato.
En su primera declaración tras ser detenido, el acusado confesó a la Guardia Civil que fue él quien cometió el crimen, aunque alegó que «no se pudo controlar» y que lo hizo «su otro yo», Se espera que durante el proceso judicial se esclarezca si el detenido ratificó esta versión ante el juez instructor o si, por el contrario, se acogió a su derecho de no declarar, una estrategia que podría haber sido recomendada por su defensa.
Dado que el detenido presenta una situación de discapacidad, el juzgado ha solicitado a Instituciones Penitenciarias su traslado a un centro, unidad o departamento que se adecúe a sus necesidades.