Imagen: ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz I EFE
El ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha presentado sus principales objetivos para 2025. Entre ellos destacan el impulso al crecimiento del empleo, el desarrollo de un plan de integración intercultural y la mejora de la protección social del sistema público. Una de las apuestas más relevantes es la ampliación del catálogo de ocupaciones de difícil cobertura, una herramienta clave para facilitar la contratación de trabajadores extranjeros en sectores con déficit de mano de obra.
El catálogo, gestionado por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) bajo el Ministerio de Trabajo, ha generado discrepancias dentro del Gobierno. El equipo de Yolanda Díaz defiende que España no enfrenta un problema estructural de vacantes y considera que cualquier cambio debe ser muy selectivo. Por su parte, Seguridad Social insiste en la necesidad de abordar la falta de personal en sectores específicos y reivindica su papel en la confección de esta lista.
Evolución del catálogo: entre la tradición y el cambio
Tradicionalmente, el catálogo incluía ocupaciones especializadas como maquinistas navales o pilotos de buques mercantes. Sin embargo, el predecesor de Saiz, José Luis Escrivá, promovió la inclusión de profesiones técnicas como soldadores, fontaneros y camioneros, tras una intensa presión de las patronales. Este cambio permitió añadir puestos relacionados con la construcción, como instaladores electricistas o montadores de carpintería metálica.
Elma Saiz busca profundizar en esta estrategia. Durante su intervención, afirmó que se priorizará una “mejor inclusión de las personas extranjeras” en el mercado laboral, señalando que el proceso será guiado por criterios objetivos. No obstante, evitó detallar qué profesiones podrían añadirse al catálogo, lo que ha generado inquietud en sindicatos y expertos.
El debate sobre las vacantes laborales
La falta de consenso entre Migraciones y Trabajo refleja una disputa de fondo sobre las vacantes en España. Mientras la Seguridad Social, apoyada por el PSOE y diversas patronales, considera que la escasez de mano de obra limita el crecimiento económico, Trabajo y los sindicatos sostienen que este problema es puntual y afecta solo a sectores específicos.
Las cifras muestran realidades distintas según el enfoque. Por un lado, el Banco de España reporta que el 42,8% de las empresas identifica la falta de personal como un obstáculo para su actividad, más del doble que hace tres años. Por otro, los datos oficiales sitúan la tasa de vacantes en España en un 0,9%, una de las más bajas de Europa y muy lejos del promedio comunitario del 2,3%.
Choque de competencias: ¿quién decide sobre el catálogo?
La disputa también tiene un componente normativo. Según la legislación actual, el SEPE es responsable de elaborar el catálogo, en colaboración con los servicios autonómicos de empleo. Sin embargo, el nuevo reglamento de extranjería refuerza el papel del Ministerio de Inclusión en este proceso, otorgándole mayor capacidad para identificar ocupaciones críticas.
El reglamento, aprobado en noviembre del año pasado, simplifica los trámites para regularizar inmigrantes y busca atraer trabajadores extranjeros. La ministra Saiz lo describe como “la reforma más ambiciosa de la última década” y asegura que contribuirá a combatir la economía sumergida y las mafias.
