La Dirección General de Consumo, dependencia del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, ha intensificado su vigilancia para asegurar la correcta aplicación de la rebaja al 0% del IVA en el aceite de oliva en las principales cadenas de supermercados del país.
Esta medida se ha implementado tras una denuncia de la organización de consumidores Facua, que acusó a las grandes cadenas de supermercados de cometer un “fraude masivo a los consumidores” al mantener altos márgenes de beneficio en la venta de este producto esencial.
En un reciente comunicado, Consumo anunció el envío de nuevos requerimientos de información a los principales operadores de distribución minorista a nivel nacional. El propósito es verificar que la reducción del IVA se refleje correctamente en el precio final del aceite de oliva. La medida de reducción del IVA, vigente desde el 1 de julio, fue introducida para aliviar el impacto de la crisis inflacionaria sobre los consumidores.
Facua ha señalado que ocho grandes cadenas de supermercados, entre ellas Alcampo, Aldi, Carrefour, Dia, Eroski, Hipercor, Lidl y Mercadona, han incrementado los precios de sus marcas propias de aceite de oliva de manera simultánea. Según Consumo, esto indica posibles incrementos ilegales en los márgenes de beneficio, lo que va en contra del decreto ley de diciembre de 2022 que prohíbe que las reducciones impositivas se utilicen para aumentar los márgenes empresariales.
Alcampo, Aldi, Carrefour, Dia, Eroski, Hipercor, Lidl y Mercadona podrían no haber hecho la rebaja
El análisis de Facua revela que, a mediados de julio, Mercadona fijó el precio del litro de aceite de oliva virgen extra de marca propia en 8,95 euros, seguido por Alcampo e Hipercor, y posteriormente por Eroski, Carrefour y Dia, con precios ligeramente diferentes. La organización también denunció variaciones de hasta 4 euros en el precio de referencias similares de aceite dependiendo de la ciudad.
Consumo ha indicado que remitirá la información recopilada al Observatorio de la Cadena Alimentaria para asegurar que la rebaja del IVA beneficia íntegramente a los consumidores y no aumenta los márgenes de beneficio de los distribuidores. Pablo Bustinduy, ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, afirmó que esta iniciativa forma parte de un esfuerzo continuo para garantizar que las reducciones del IVA se traduzcan en precios más bajos para los consumidores.
La aplicación de las reducciones de IVA en alimentos ha sido objeto de debate desde su implementación. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia anteriormente no encontró evidencias de que los distribuidores evitaran aplicar estas reducciones. Sin embargo, el reciente cambio que coloca el aceite de oliva en la categoría de IVA superreducido, temporalmente suspendido al 0%, ha llevado a una reevaluación de su impacto en los precios al consumidor.
Consumo ha analizado más de 60,000 precios minoristas y un catálogo de casi 24,000 establecimientos en todo el país tras las primeras bajadas impositivas, concluyendo que los precios finales de los productos afectados se redujeron generalmente después de la rebaja del IVA en enero de 2023. Ahora, se espera que las nuevas medidas de vigilancia aseguren la transparencia y el cumplimiento de la normativa en beneficio de los consumidores.