Cuando en 2013 Hugo Chávez, debilitado por el cáncer, designó a Nicolás Maduro como su sucesor, pocos imaginaban que el exconductor de autobús y sindicalista lograría mantenerse en el poder por más de una década. Sin embargo, Maduro sigue en el cargo. Su fortaleza no solo proviene de su liderazgo, sino también de un círculo de poder que ha sabido mantener unido al chavismo. Este grupo, que comparte la herencia política de Chávez, ha sido fundamental para la permanencia de Maduro en el poder, en medio de una de las crisis políticas y económicas más graves de América Latina.
Cilia Flores: La «primera combatiente»
Cilia Flores, abogada y esposa de Nicolás Maduro, es una de las figuras más influyentes en el entorno del mandatario. Apodada por él como «primera combatiente», ha demostrado ser mucho más que una primera dama tradicional. Su carrera política comenzó en la década de 1990, cuando se unió a la defensa legal de los militares que participaron en el golpe fallido de Chávez en 1992. Desde entonces, ha ocupado altos cargos, incluyendo la presidencia de la Asamblea Nacional y la Procuraduría General de la República.
Flores ha sido sancionada por Estados Unidos y la Unión Europea, lo que también ha salpicado a su familia. A pesar de ello, ha mantenido su influencia, y algunos la ven como el poder detrás del trono de Maduro. Aunque ha adoptado un perfil más discreto en los últimos años, continúa jugando un rol en la toma de decisiones del gobierno.
Diosdado Cabello: El número dos del chavismo
Diosdado Cabello es uno de los nombres más poderosos del chavismo. A menudo visto como el «número dos», ha sido el brazo derecho de Maduro desde la muerte de Chávez. Exmilitar, Cabello ha ocupado una variedad de cargos, entre ellos la presidencia de la Asamblea Nacional y del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). A lo largo de su carrera ha sido vinculado con supuestas actividades de corrupción y narcotráfico, lo que le ha valido sanciones y una recompensa de 10 millones de dólares ofrecida por Estados Unidos por su captura. Cabello ha rechazado constantemente estas acusaciones y ha defendido su lealtad a la revolución bolivariana. Pese a las especulaciones de rivalidad entre él y Maduro, ha demostrado ser un aliado confiable, lo que ha sido clave para evitar fracturas dentro del chavismo.
Vladimir Padrino López
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, ha sido una figura clave para la estabilidad del régimen de Maduro, al garantizar la lealtad de las Fuerzas Armadas. Padrino ha mantenido su puesto desde 2014, un tiempo récord para cualquier ministro de Defensa en Venezuela. Su capacidad para mantener el control de las Fuerzas Armadas y equilibrar las diferentes facciones militares le ha permitido consolidar su poder y permanecer como un aliado incondicional de Maduro. Bajo su gestión, los militares han ganado influencia en áreas estratégicas de la economía venezolana, como el control del petróleo y la minería. Este incremento del poder militar ha sido esencial para la continuidad del gobierno de Maduro.
Jorge Rodríguez
Jorge Rodríguez, psiquiatra y actual presidente de la Asamblea Nacional, es uno de los más cercanos operadores políticos de Maduro. Su influencia dentro del chavismo comenzó en 2003, cuando, como rector del Consejo Nacional Electoral, organizó el referéndum que ratificó a Chávez en el poder. Desde entonces, Rodríguez ha ocupado altos cargos, como la vicepresidencia de la República y la alcaldía de Caracas. A lo largo de los años, ha liderado las negociaciones del gobierno con la oposición y ha desempeñado un rol clave en la organización de las campañas electorales del oficialismo. Algunos lo ven como un posible sucesor de Maduro, debido a su capacidad intelectual y su habilidad para maniobrar políticamente en un entorno cada vez más complicado.
Delcy Rodríguez
Delcy Rodríguez, hermana de Jorge y actual vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, también ha sido una pieza central en el gobierno de Maduro. Con una carrera que abarca desde la diplomacia hasta la gestión económica, ha sido ministra de Comunicación e Información, canciller y presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente. Rodríguez ha representado al gobierno de Maduro en el extranjero en momentos de gran tensión diplomática. También ha estado involucrada en controversias como el llamado “Delcygate”, cuando en 2020 violó una prohibición de entrada a Europa al reunirse en España con un ministro del gobierno. Al igual que los otros miembros del círculo de poder de Maduro, ha sido sancionada por la UE y Estados Unidos.