Esta mañana, la Cámara Alta ha debatido una moción del Partido Popular que solicita al Gobierno la adopción de “medidas a favor de la transparencia de las instituciones y de la lucha contra la corrupción”. El debate, que ha sido intenso, se ha visto intensificado por las intervenciones del portavoz de Junts en el Senado, Eduard Pujol.
Durante su intervención en el debate sobre la moción, Eduard Pujol ha lamentado que en España “no haya nadie capaz de decir basta al juez Llarena” y ha calificado al magistrado como un “Tejero 3.0 sin bigote”, en referencia a Antonio Tejero, el teniente coronel de la Guardia Civil que protagonizó el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981. Esta alusión ha sido considerada fuera de lugar, y el presidente del Senado no ha dudado en llamar al orden al político catalán, pidiéndole que revisara sus formas durante las intervenciones.
Eduard Pujol ha hecho caso omiso de las palabras de Pedro Rollán y el presidente de la Cámara ha insistido en sus palabras: “No consiento que se haga ninguna referencia con nombres y apellidos a ningún magistrado, menos en estos términos, su tiempo ha finalizado”. Tras dirigirse así al portavoz de Junts, le retiró la palabra al político catalán.
El portavoz de Junts utiliza la figura de Tejero para desprestigiar a los políticos y jueces
Tras su polémica intervención, la moción ha continuado con los políticos que debían intervenir. A los pocos minutos se ha conocido la noticia de que el juez Llarena no acepta el recurso del expresidente catalán, Carles Puigdemont, en la que se confirma que el magistrado no acepta la petición de aplicar la ley de amnistía al prófugo catalán.
Así, en su intervención posterior, Pujol ha vuelto a la carga: “A quién deberían retirar la palabra es a los prevaricadores, a los populistas que comen fruta con la boca llena de mentiras sobre Catalunya y a los Tejero 3.0, la democracia española les daría las gracias”.
Esta comparación que ha hecho Pujol entre el juez Llarena y Antonio Tejero, no es algo nuevo. El pasado 13 de agosto durante la comparecencia del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, sobre la posición de la Moncloa en relación con Venezuela. Pujol aprovechó este momento para reprochar al Poder Judicial que “se burle impunemente” de la ley de amnistía y “se mofe” del Congreso con un “golpe de Estado judicial” y tachó a Llarena de “Tejero sin bigote”.