La Fuerza Aérea israelí, a través de su rama aérea del Puño de Hierro (Egrof), está utilizando cazabombarderos F-15I para llevar a cabo ataques sobre el sur de Beirut, zona que es el bastión principal de Hizbulá. Estos aviones son una versión modificada del F-15E Strike Eagle, con mejoras realizadas por Israel Aircraft Industries (IAI), adaptadas a las necesidades operacionales de la Fuerza Aérea de Israel (IAF) en la región.
Modificaciones y capacidades avanzadas del F-15I
El F-15I, denominado localmente como «Raam» (Trueno), cuenta con importantes modificaciones respecto al modelo original. Entre ellas destaca un motor más potente y un radar APG-70 capaz de mapear el terreno con alta resolución. Este radar puede detectar aviones grandes a una distancia de hasta 280 kilómetros y aeronaves más pequeñas, con una firma de radar reducida, a 100 kilómetros. Estas mejoras permiten a Israel realizar ataques más precisos y eficaces en un entorno complejo como el de Beirut.
El F-15 Eagle, fabricado inicialmente por McDonnell Douglas y luego por Boeing, ha demostrado ser un caza legendario en el combate aéreo, con un récord intachable de 104 victorias y ninguna derrota. Este éxito llevó al desarrollo del F-15E Strike Eagle, un avión biplaza optimizado no solo para misiones aire-aire, sino también para ataques a tierra, que comenzó a operar en 1989.
Israel, uno de los primeros países en adoptar el F-15, adquirió 25 unidades del F-15I, que están en servicio en el 69º Escuadrón, basado en Hatzerim, al sur del país. Con una velocidad que alcanza el doble de la del sonido y un alcance «ilimitado» gracias al reabastecimiento en vuelo, este avión puede llevar hasta 8.600 kilos de armamento, incluyendo misiles aire-aire, aire-tierra, bombas de racimo y armas de precisión guiadas por láser o satélite.
Bombas antibúnker y la muerte de Hassan Nasrallah
En los recientes ataques a Beirut, el F-15I ha utilizado las bombas antibúnker BLU-109 de 900 kilos, probablemente equipadas con el sistema JDAM para convertirlas en armas de alta precisión. Estas bombas habrían sido las responsables de acabar con Hassan Nasrallah, líder de Hizbulá. Su capacidad destructiva y precisión hacen de estas bombas un elemento crucial en la ofensiva israelí.
Aunque la Fuerza Aérea israelí dispone de aviones más avanzados, como los F-35, el F-15I sigue siendo uno de los activos más eficaces y rentables en combate. Israel ha firmado un acuerdo con Estados Unidos para adquirir 50 nuevas unidades del F-15IA (con inteligencia artificial), que llegarán probablemente a finales de esta década. Estas plataformas contarán con actualizaciones importantes, especialmente en capacidades de guerra electrónica, vitales en los modernos teatros de conflicto saturados de señales tecnológicas.