Felipe VI ha organizado una reunión el próximo miércoles 6 de noviembre en el Palacio de la Zarzuela que convoca a organizaciones empresariales, de seguros y financieras, así como a los principales sindicatos de España para analizar la situación de Valencia tras el paso de la DANA.
Esta reunión no estaba prevista de manera inicial en la agenda de esta semana, pero los Reyes han decidido modificarla y cancelar la mayor parte de sus compromisos debido a la magnitud de la catástrofe de la DANA con el fin de volcarse en todo lo relacionado con la gestión de la recuperación de dicha comunidad autónoma y sobre todo, de los damnificados.
La Casa del Rey ha confirmado que mañana recibirá en una audiencia a las 11:30 en el Palacio de la Zarzuela a los representantes de la CEOE, la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (Cecam) así como de CEPYME. A esta reunión asistirán también representantes de la Asociación de Trabajadores Autónomos, de la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras y la Asociación Española de Banca.
Según se ha conocido, mañana por la tarde está previsto que el Rey tenga una audiencia con Pepe Álvarez, secretario general de UGT y Unai Sordo, CCOO. La agenda de la Zarzuela ha confirmado ambas audiencias. Ambas reuniones están centradas en la recuperación de las infraestructuras y las vidas de los valencianos que han sufrido la catástrofe de la DANA, hace apenas seis días.
Sánchez huye de Paiporta y abandona a los Reyes y Mazón en la comitiva conjunta
Además de estas dos audiencias, el monarca tiene previsto reunirse con el secretario general iberoamericano, Andrés Allamand, con quien abordará la próxima Cumbre Iberoamericana que se celebrará el 14 y 15 de noviembre en Ecuador y a la que está prevista la asistencia del jefe del Estado.
El pasado domingo, los Reyes visitaron junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, el pueblo valenciano de Paiporta, con el fin de conocer de primera mano la situación que se está viviendo allí. Uno de los puntos clave de la visita de los monarcas era conocer por qué no llegaba la ayuda después de varios días que se había pedido.
La visita dejó una imagen controvertida del presidente del Gobierno, debido a que a los pocos minutos de comenzar la comitiva conjunta con los Reyes y Mazón decidió huir. Sánchez abandonó el lugar con sus guardaespaldas, mientras la reina Letizia, el rey Felipe y Mazón continuaron la comitiva aguantando los gritos y el barro que les lanzaban.