La buena noticia no es solo que Dominique Pelicot, su exmarido, haya sido condenado a 20 años de cárcel la pena máxima en Francia por drogar y violar a Gisèle Pelicot y ofrecerla a otros 52 hombres para que abusaran de ella durante cerca de una década. También fue declarado culpable de realización y distribución de imágenes sexuales de Gisèle Pelicot, de su hija mayor, Caroline, y de las esposas de sus hijos. No podrá optar a la libertad condicional hasta que haya cumplido dos tercios de la pena. La verdadera noticia es que la sociedad ha arropado a la víctima, quien decidió dar la cara desde el inicio del juicio para que la vergüenza “cambie de bando”.
Desde que comenzó el proceso, Gisèle Pelicot se ha convertido en un símbolo de resistencia . Tras conocerse la sentencia, se multiplicaron los mensajes de apoyo y agradecimiento hacia ella por su coraje al representar a tantas mujeres que han vivido situaciones similares. Expertos en derechos humanos coinciden en que su actitud digna podría marcar un cambio significativo en la lucha por la igualdad y la justicia para las víctimas de violencia sexual.
Se destaca el contraste entre la serenidad de Gisèle y la actitud de los acusados. “Durante todo el proceso, Gisèle Pelicot, digna y con la cabeza en alto, mostró su rostro sereno, sin gafas de sol, mientras los acusados permanecían con el rostro completamente cubierto”. La propia Gisèle expresó su deseo de convertirse en “un viento de cola” para que las víctimas pierdan el miedo y la vergüenza de denunciar y hablar.
El tribunal, compuesto por cinco jueces, declaró culpable a Dominique Pelicot de violación agravada y otros delitos, imponiéndole la pena máxima. Además, todos los demás acusados involucrados en este caso también fueron condenados. Los otros 50 acusados recibieron penas de entre 3 y 15 años, inferiores a lo que pidieron los fiscales. De ellos, 46 fueron declarados culpables de violación, 2 de intento de violación y 2 de agresión sexual.
Tras la condena, Dominique Pelicot rompió a llorar en la sala del tribunal de Aviñón, donde se ha llevado a cabo este juicio que ha durado casi cuatro meses. Los otros acusados también mostraron diferentes reacciones, desde el silencio hasta intentos de justificar sus actos ante las acusaciones.
Dominique Pelicot recibe 20 años de cárcel mientras Gisèle transforma el silencio en justicia
Tras la condena Dominique Pelicot rompió a llorar en la sala del tribunal de Aviñón
Comparte la nota
Noticias relacionadas
No hay más noticias