El lunes pasado lunes Pere aragonés abandonó la política y su acta de diputado. Una decisión que tomó después de admitir los malos resultados en las elecciones catalanas del 12 de mayo. Hay que recordar que el partido independentista pasó de tener 33 diputados a 20 y pasó de ser la tercera fuerza política en Cataluña, a estar por detrás de Junts.
El miércoles Oriol Junqueras anunció que había tomado la misma decisión que Aragonés, aunque en su caso declaró que lo haría de manera temporal después de las elecciones europeas que tendrán lugar el 9 de junio. A través de un comunicado anunció que: “Dejará la presidencia para abrir un proceso de reflexión y escucha activa antes de decidir su futuro”. Aunque esta decisión ha destacado mucho debido a que horas antes Junqueras estaba dispuesto a dirigir a los independentistas si hubiera una repetición de las elecciones autonómicas.
Pero Aragonés y Junqueras no son los únicos miembros de la cúpula de ERC que ha dimitido de la política tras las elecciones autonómicas. Así, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha confirmado que no se va a presentar a la reelección para el cargo en el Congreso que está convocada para el próximo 30 de noviembre de 2024. Una decisión que tampoco se podía esperar y que ha hecho pública a través de una carta, en la que explica que el motivo de su decisión es debido a los malos resultados en las elecciones catalanas: “Como militante de base, y por coherencia, he comunicado a los compañeros y compañeras de la dirección nacional que no me presentaré a secretaria general en el próximo congreso nacional”.
Marta Rovira deberá declarar por el caso ‘Tsunami’
Por otro lado, Marta Rovira no podrá declarar por videoconferencia desde Suiza debido a que el juez ha pedido su testimonio por una supuesta responsabilidad en ‘Tsunami Democrátic’. Hay que destacar que esta plataforma convocó en 2019 unas protestas callejeras contra la sentencia del ‘procés’. El instructor ha confirmado que la declaración a través de videollamada no es posible debido a que: “está contemplado con el fin de agilizar el curso de las actuaciones evitando los retrasos que pudieran derivarse de la necesidad de coordinar la presencia de los intervinientes en la declaración cuando su desplazamiento les resultare gravoso o imposible de llevar a cabo con inmediatez”.
Es por este motivo que la videoconferencia se hace “cuando se puede implementar de manera ágil, lo que sucede cuando se utiliza en el territorio nacional”.
