Una vez concluida la 37º Edición la TEFAF Maastrich 2024. Se publican determinados datos de ventas de distintos expositores. En líneas generales ya desde la dirección y la organización se ha concluido con el éxito rotundo de la feria. Una feria que ha sabido calar y que se ha caracterizado por el dinamismo y la viveza del arte.
Desglose de ventas en función del tipo de arte.
En el preestreno, el Rijksmuseum de Ámsterdam anunció que había adquirido el único cuadro firmado por Gesina ter Borch (1631-1690). Miembro de una de las familias artísticas más importantes de los Países Bajos del siglo XVII. Fue adquirido a Zebregs&Röell, un expositor que comenzó en la sección de Showcase y que participó en el programa general de la feria por primera vez en 2024.
Antigüedades
· Libraire Camille Sourget informó de que más de la mitad de sus ventas se realizaron a nuevos clientes. Incluido un libro muy codiciado y visual sobre historia natural y aves de François Levaillant; que atrajo a numerosos interesados y que se vendió por cerca de 100.000 euros.
· Alessandra Di Castro realizó 12 ventas, entre ellas una vista imaginaria de la Antigua Roma de Armando Brasini. Adquirida por un coleccionista privado francés.
· Koopman vendió el sello personal del almirante Lord Nelson a un coleccionista privado; comentando que «los clientes estaban extremadamente interesados en las mejores piezas».
· La Pendulerie vendió 15 relojes, uno de los cuales, reloj de sobremesa en forma de jarrón. Fue a parar a manos de un coleccionista estadounidense por una elevada suma de seis cifras. El único reloj conocido de este tipo se encuentra en el Museo del Kremlin.
· Prahlad Bubbar vendió dos retratos de la Maharani de Indore que, con su marido el Maharajá; estaba en la vanguardia de la sociedad de los años treinta en París y Nueva York. Ávidos coleccionistas, la pareja encargaba las mejores obras de arte y diseño de su época, pero ella murió trágicamente a los 23 años. Los retratos fueron adquiridos respectivamente por un coleccionista privado y una importante institución estadounidense.
· São Roque anunció haber encontrado entablado relación con nuevos clientes durante la feria. Además de haber suscitado un gran interés entre los museos. Vendió su espejo safávida del siglo XVII a la Fundación Aga Khan de Toronto por unos 200.000 euros.
· Helga Matzke informó de la presencia de visitantes más jóvenes con interés por las antigüedades. Entre las ventas, cabe destacar la de un llamativo salero que representaba la Pasión de Cristo con Sibilas y Profetas; vendido a un museo polaco.
· Univers du Bronze suscitó mucho interés por su colección de obras de Hubert de Gall. Vendió, entre otras piezas, dos de la edición original fundida de ocho L’Eternal Printemps, un mueble de bronce de 600 kg.
· Adrian Sassoon informó de ventas de piezas de gama alta a coleccionistas de Maestros Antiguos, junto con varias ventas a compradores locales. Su pieza estrella, Propagation Project, de Junko Mori: Textured Leaf Wave, 2023, se vendió a un coleccionista privado estadounidense que tiene previsto donarla a un importante museo de su país.
Galerie Sismann realizó dos importantes ventas a la Fondation Gandur y al Musée Sint-Janshospitaal de Brujas.
Waddington Custot confirmó múltiples ventas de seis cifras, incluidas obras de Barry Flanagan, Bernar Venet y Fabienne Verdier.
Tóth Ikonen, que celebra el 50º aniversario de la galería en TEFAF Maastricht, vendió todos los días de la feria, incluso a nuevos clientes, jóvenes coleccionistas y visitantes que acudían por primera vez a TEFAF. La galería vendió una veintena de iconos destinados a colecciones de Irlanda, Francia, Bélgica, Alemania y los Países Bajos, entre ellos un sorprendente Tríptico Ortodoxo Viajero y un icono que representa el encuentro de Joaquín y Ana (padres de María).
· Ninguna visita a TEFAF estaría completa sin admirar algunas de las espectaculares piezas de cerámica de Delft. En el stand de Aronson Delftware, se vendió por unos 300.000 euros una magnífica Flor piramidal azul y blanca que había pertenecido al fotógrafo de moda británico Cecil Beaton.
Arqueología
· Charles Ede informó de la venta de casi la mitad de su stand. Incluidos dos productos destacados: un ánfora griega de figuras rojas de Sotades, de hacia 450 a.C., a un coleccionista privado estadounidense, y una elegante figura helenística de mármol representando una mujer, a un coleccionista europeo. La galería realizó ventas todos los días de la feria, con tres ventas de seis cifras y algunas a nuevos clientes.
· Ariadna regresó a TEFAF después de casi un cuarto de siglo, avisando del interés de varias instituciones por sus obras. Las ventas de la galería incluyeron un grupo de vasijas egipcias valoradas en 35.000 euros cada una y una cabeza de mármol romana valorada en 95.000 euros.
Pinturas
Antonacci Lapiccirella Fine Art describió esta edición de TEFAF como «una feria extraordinaria… tanto en términos de excelencia como de calidad» y vendió un total de 13 cuadros. Entre ellos una importante obra del pintor y diseñador británico Sir Edward Burne-Jones, figura destacada del movimiento prerrafaelita inglés, y un autorretrato del artista italiano Pierre Troubetzkoy.
· David Tunick, Inc. vendió varias obras, tres de ellas del pintor noruego Edvard Munch, y otras dos a coleccionistas privados y a un museo.
La galería M.S. Rau de Nueva Orleans, que exponía por primera vez, realizó importantes ventas de obras de los pintores franceses Claude Monet, Berthe Morisot y Henri Martin, además de la venta principal de Tête de Paysanne à la Coiffe Blanche de Van Gogh.
Matteo Salamon vendió Crucifixión con dos ángeles c.1360 del pintor italiano Andrea Bonaiuti por una suma de cinco cifras a un nuevo coleccionista privado suizo que va a fundar su propio museo.
· La Galería Weiss vendió su obra más destacada, un magnífico retrato de Sir Edward Turner, obra del pintor inglés del siglo XVII John Michael Wright, a un coleccionista privado por una cantidad no revelada de seis cifras.
Dickinson, de Londres, vendió un encantador trampantojo de Laughing Boy, del pintor alemán Henri-Guillaume Schlesinger, pintado en parte para desafiar al recién inventado medio de la fotografía. Se vendió por cerca de 120.000 euros a un coleccionista privado europeo.
· Caretto & Occhinegro ha vendido a un coleccionista privado de los Países Bajos un tríptico del siglo XVI de La Transfiguración de Cristo, obra del pintor y escultor belga Pieter Coecke Van Aelst, por unos 850.000 euros. Se cree que Van Aelst pudo inspirarse en la Transfiguración de Bellini, que habría visto en Venecia en su viaje de regreso de Bizancio a los Países Bajos.
Arte moderno y contemporáneo, y diseño
· La galería Bailly, con sede en Ginebra, vendió a un coleccionista europeo privado su obra más importante. Femme au Chapeau, del pintor franco-neerlandés Kees van Dongen, por una suma de siete cifras, así como otras seis obras a coleccionistas privados de Bélgica, Alemania, Italia y Estados Unidos.
· White Cube demostró la fuerza de la sección de arte contemporáneo en TEFAF Maastricht. Entre varias ventas se encontraban obras de la artista inglesa Tracey Emin, el artista alemán Imi Knoebel y el pintor y escultor alemán Georg Baselitz, todas ellas vendidas por entre 300.000 y 525.000 libras esterlinas.
· Alon Zakaim vendió a un coleccionista privado La Liseuse II, del escultor lituano Jacques Lipchitz. Obra que tenía un precio de venta de 970.000 euros, además de una obra de Renoir.
· La galería vienesa bel etage vendió Modell London -18 sillas diseñadas por Portois & Fix- a un coleccionista privado de Asia por unos 65.000 euros.
· La Galerie Karsten Grève, con sede en Suiza y especializada en arte de posguerra y contemporáneo, vendió obras de la artista estadounidense Kathleen Jacobs. La cuál está obteniendo el reconocimiento internacional que merece, además de Landschaft mit Baum 1893, del pintor suizo Ferdinand Hodler, a un importante coleccionista europeo con espacio público por 200.000 euros.
· Thomas Salis vendió L’ Anier de Scheveningen, del pintor neerlandés-francés Kees van Dongen, considerado uno de los cuadros más impresionantes del periodo postfauvista del artista, a un coleccionista privado europeo, así como Bright Sky behind Apple Tree, de la pintora alemana Paula Modersohn-Becker, a un coleccionista estadounidense que lo donará a un museo de su país.
· Pierre Marie Giraud vendió una obra en vidrio del artista japonés Yoichi Ohina por unos 60.000 euros y Bassin, del ceramista francés Jean Girel, a un coleccionista privado por unos 12.000 euros.
· Templon informó de múltiples ventas de entre cinco y seis cifras, incluidas obras del artista belga Antoine Roegiers, de la japonesa Chiharu Shiota, del belga Hans Op de Beeck, del artista belga Jan Van Imschoot, del francés Philippe Cognée y del pintor estadounidense Philip Pearlstein.
Obras sobre papel
· Agnews Works on Paper vendió varias obras del pintor y escultor italiano Amedeo Modigliani. Entre ellas Tête et épaules de face, Homme nu de face, bras écartés y Tête et épaules de face avec frange, todas a coleccionistas privados.
· Nicolaas Teeuwisse realizó una importante venta al Rjiksmuseum. Que adquirió El descanso en la huida a Egipto, un dibujo extremadamente raro del pintor holandés Gerrit Pietersz.
· El especialista en dibujos de maestros Colnaghi Elliott realizó varias ventas entre los 5.000 y los 60.000 euros; una de ellas confirmada a un museo.
· La galería alemana Utermann vendió Femme au tablier, del pintor y escultor español Pablo Picasso, por casi 2 millones de euros a una colección privada estadounidense, además de una acuarela del pintor y diseñador gráfico alemán Ernst Wilhelm Nay, vendida por 125.000 euros a un coleccionista privado alemán.
· Wienerroither & Kohlbacher, con sede en Viena, vendió varias obras de artistas austriacos, entre ellas El collar de pieles, de Gustav Klimt, perdida hasta entonces, por 290.000 euros, y Alegoría femenina con rama de laurel, de Koloman Moser, por 36.000 euros, ambas a coleccionistas privados suizos.
Buen balance para la representación española.
La representación española en la convención contaba con 5 galerías. Todas ellas de diversa representando distintos estilos y ramas artísticas. En general el balance para ellas en lo que ha ventas se refiere es positivo; ya no solo por la calidad de las piezas, ya que coleccionistas privados como instituciones públicas han adquirido piezas.
La presencia en una feria de estas características sitúa al expositor en la elite mundial. Todos presentaron unos stands y género de nivel; destacar a Deborah Elvira quien atendió a nuestro medio y nos ilustró respecto de aspectos generales de TEFAF, como en particular sobre cuestiones de joyería de alta época. Un viaje por la historia a través de piezas españolas y portuguesas de alta época. Así pues, es una gran noticia ver el valor que se le da a la joya histórica española a nivel internacional. Máxime con una representación de alto nivel.
Tradicionalmente se ha considerado a la joyería como un arte menor. Algo erróneo puesto que la joyería supone la aplicación de técnicas de pintura y escultura; junto con el diseño y la precisión únicas que se requieren para que la joya adquiera su carácter propio. Además de juntarse los conocimientos relativos a gemología. Se trata de un arte mayor con todas las letras.
Deborah Elvira realizó cuatro ventas a museos, entre ellos el Muzeum Narodowe w Poznaniu de Polonia. Entre las ventas a coleccionistas privados figura una cruz procesional de Santo Domingo, de hierro forjado y pintado, del siglo XVI, vendida por una suma de cinco cifras.
Colnaghi anunció la venta del Descendimiento de la Cruz del pintor portugués Domingos António de Sequeira, que suscitó un gran interés internacional y que regresará a su Portugal natal. Se cree que la obra fue adquirida por un coleccionista privado con intenciones de exponerla al público.
Mayoral, ha vendido la obra Lurra G-257 de Eduardo Chillida a un coleccionista privado francés.
Caylus registró fuertes ventas, entre ellas Retrato de la infanta Catalina Micaela, duquesa de Saboya, del pintor español Alonso Sánchez Coello, y Anunciación, del taller de El Greco, ambas vendidas a colecciones privadas y por cada una se pedían 150.000 euros.
Artur Ramon Art vendió alrededor de una veintena de piezas, de entre 10.000 y 500.000 euros, entre otras la mesa Biennais y varias hispanomorescas de malinas y esculturas de Malines. Nos comentó que para él había sido la mejor TEFAF hasta ahora.
En definitiva la feria se ha saldado con éxito en todos los aspectos. La representación española ha dado muestras de la calidad que ostenta y de su profesionalidad. Resulta un aliciente ver como el dinamismo en el mercado del arte llama a jóvenes y nuevos coleccionistas. La próxima edición de TEFAF se dará durante el mes de mayo de este año en la ciudad de Nueva York.