En una contundente intervención ante las autoridades locales, Laura Miró, doctoranda, ha expuesto la grave situación de acoso y desprotección que sufre la Comunidad Judía en las Islas Baleares. A través de ejemplos concretos, como la necesidad de protección policial en sus celebraciones religiosas y la cancelación de eventos culturales, Miró ha solicitado medidas urgentes para garantizar la seguridad y el derecho a la autodeterminación de su comunidad.
¿Podrías compartir alguna experiencia personal en la que hayas sentido acoso o discriminación debido a tu identidad judía?
El pasado 5 de abril se celebró una conferencia en la Universitat de les Illes Balears (UiB) donde se me señaló como sionista en pantalla. Anteriormente, los organizadores de esa conferencia, los mismos que han llevado a cabo las acampadas en el campus, pidieron mi expulsión de la universidad en redes sociales.
¿Conoces a otros miembros de la comunidad que hayan pasado por situaciones similares?
No conozco más casos de estudiantes, pero, como dije en el pleno del Ayuntamiento, me consta que la gente de la comunidad sufre con los mensajes de odio que ven en la misma calle: se vandalizan paredes y suelos con lemas de «Israel, genocida» o «fuera sionistas» y esto hace que eviten exhibir los símbolos identitarios judíos por miedo a sufrir agresiones.
¿Las autoridades han tomado partido en este contexto de acoso?
En la UiB, se mandó una carta de disculpa a la Federación de Comunidades Judías de España por la celebración de una conferencia (la misma en la que me señalaron) donde se banalizó el Holocausto y se justificaron los atentados de Hamás entre otras barbaridades. Por otra parte, creo que lo más grave es que haya habido representantes del consistorio de Palma que hayan contribuido al auge del antisemitismo.
Como dije el otro día, calificaron una de nuestras conferencias de «acto criminal» y «justificadora de un genocidio», una conferencia que versaba de Historia Antigua mayormente. Creo que todo esto contribuye al caldo de cultivo antisemita.
¿Cómo describirías la percepción general de la comunidad judía en las Islas Baleares? ¿Crees que hay un aumento en los incidentes de acoso en los últimos años? Si es así, ¿a qué lo atribuyes?
Antes del 7 de octubre prácticamente todos creíamos que el antisemitismo era cosa del pasado. No se sufría. Todo ha cambiado a partir de esta fecha que, curiosamente, fue una agresión que sufrió Israel.
¿Ha habido algún impacto significativo en la participación en actividades religiosas o comunitarias debido a estos incidentes?
La Comunidad en Mallorca está configurada sobre todo por personas mayores y el hecho de que se hayan tenido que poner medidas de seguridad les crea una sensación de miedo que hacen que se lo piensen antes de asistir.
¿Existen programas o iniciativas locales para combatir el antisemitismo y apoyar a las víctimas de acoso?
Hemos creado una plataforma Mallorca contra el Antisemitismo, también hemos creado un manifiesto dirigido a periodistas y políticos, gente que influye en la opinión pública, para que tengan en cuenta que la divulgación de una sola versión del conflicto alimenta el discurso del odio antisemita.
¿Qué medidas crees que podrían implementarse para reducir el acoso y la discriminación contra la comunidad judía en las Islas Baleares?
Precisamente apelo a la prudencia del discurso para rebajar esta judeofobia que se representa en la criminalización del Estado de Israel
