Imagen: Joe Biden en su despacho presidencial. Kent Nishimura
El presidente estadounidense Joe Biden advirtió este miércoles a Israel de que Estados Unidos no apoyará que se ataquen instalaciones nucleares en Irán. Las declaraciones llegan tras el ataque de Teherán contra Tel Aviv y Jerusalén del pasado martes, en el que se dispararon un total de 200 misiles balísticos. «La respuesta es no», afirmó Biden a los medios ante la posibilidad de que el Gobierno del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu tome represalias.
Biden hizo estas breves declaraciones antes de subir al helicóptero presidencial y detalló que el G7 está trabajando «en una declaración conjunta» para condenar el ataque iraní. «Discutiremos con los israelíes lo que van a hacer», ya que Israel «tiene la necesidad de responder», afirmó.
En un comunicado, la Casa Blanca informó este miércoles de que Biden participó en una llamada con el G7 para analizar «el inaceptable ataque de Irán contra Israel y coordinar una respuesta«, que incluirá nuevas sanciones.
El jefe del Estado Mayor del Ejército de Israel, el teniente general Herzi Halevi, aseguró este miércoles que Israel pretende responder al ataque masivo iraní y que tiene «la capacidad para alcanzar y golpear cualquier punto de Oriente Medio». «Aquellos de entre nuestros amigos que no lo hayan entendido aún, pronto lo entenderán», amenazó Halevi.
Israel no descarta un ataque a las centrales nucleares
El país hebreo podría responder atacando infraestructuras estratégicas de Irán, como plataformas de gas o petróleo o apuntando directamente a las instalaciones nucleares de Irán, según informaron los medios el miércoles. Los asesinatos selectivos y los ataques a los sistemas de defensa aérea de Irán también son posibles respuestas, según informó Axios, citando a fuentes conocedoras israelíes.
Un ataque a las instalaciones petroleras iraníes podría devastar la economía del país, y cualquiera de las respuestas consideradas podría marcar otra escalada, casi un año después del inicio de la guerra en curso que comenzó cuando el grupo palestino Hamás atacó a Israel en octubre de 2023.
«Tenemos un gran interrogante sobre cómo responderán los iraníes a un ataque, pero tenemos en cuenta la posibilidad de que se lancen con todo, lo que sería un juego completamente diferente», dijo un funcionario israelí a Axios.
En Israel, los ministros prometieron que Irán lamentaría el ataque, mientras que los políticos, incluidos los de la oposición, pidieron una respuesta contundente. El ministro de Asuntos Exteriores Israel Katz declaró el martes en un comunicado: “El régimen de los ayatolás ha cruzado la línea roja y el Estado de Israel no se quedará callado ante el ataque criminal de Irán contra nuestros ciudadanos”.
El ministro de Defensa Yoav Gallant escribió en X: “Irán no ha aprendido una lección sencilla: quienes atacan al Estado de Israel pagan un alto precio”.
El líder de la oposición, Yair Lapid, también dijo en un comunicado el miércoles por la mañana que “la respuesta debe ser dura y enviar un mensaje claro a todo el eje: Irán, Yemen, Siria, Líbano y Gaza”, nombrando países y territorios desde los que los grupos terroristas respaldados por Irán han lanzado ataques contra Israel.