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El periodista vasco cumple su segundo año de prisión preventiva en Polonia. Las condiciones en las que se encuentra son de régimen de aislamiento y a la espera de juicio.
Pablo González lleva arrestado y encarcelado desde el 28 de febrero de 2022. Había acudido a Polonia para realizar labores periodísticas como experto en Europa del Este. En concreto, cubrir la crisis humanitaria y el éxodo causado por la invasión rusa de Ucrania.
Pablo González (1989) natural de Moscú, ostenta nacionalidad doble ruso-española; por ser nieto de un “niño de la guerra”: tiene pasaporte ruso con el nombre de Pavel Rubtsov.
¿De que cargos se acusa a Pablo González?
El estado polaco le acusa de espionaje para Rusia, aunque no se le encuadra en ninguna acción u hecho concreto del que se pueda defender. La Agencia Polaca de Seguridad Interior (ABW por sus siglas en polaco) señaló a González por presuntamente usar su profesión para encubrir actividades para los servicios de inteligencia rusos (GRU), no se han aportado pruebas o han salido a la luz indicios. Por este tipo de actividades se contemplan penas de hasta 10 años de prisión.
Según informa elDiario.es, se han llevado a cabo algunas diligencias de investigación que, según explica su entorno, podrían haberse hecho hace dos años. Se han cursado diversas comisiones rogatorias a distintos estados, España, incluida. En la emitida a España se pedía investigar la cuenta bancaria de Pablo González y tomar declaración a su entorno, cosa de la que se ha ocupado la Audiencia Nacional.
Reacciones sobre el segundo año en prisión.
El ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, ha vuelto a pedir un «juicio justo, oral contradictorio y público», ha asegurado que está en contacto permanente con las autoridades polacas y que ha pedido a su homólogo polaco, Radosław Sikorski, que hable con el titular de Justicia para «solucionar esto». «Hacemos todo lo posible para facilitar la comunicación», ha asegurado Albares en la sesión de control en el Parlamento, donde ha asegurado que la embajada ha visitado a González hasta en 17 ocasiones.
Agustín Yanel, secretario general de la Federación Española de Sindicatos de Periodistas (FESP), organización que forma parte de la Federación Europea (FEP) y de la Federación Internacional de Periodistas (FIP), pide también que se cumpla el Derecho de la Unión Europea.
«Pedimos que la justicia polaca concrete qué acusaciones tiene contra Pablo González. – asegura a RTVE – Le detuvieron bajo la acusación genérica de espiar para Rusia, pero no han dicho de qué delitos concretos le acusan, para que su abogado prepare su defensa».
Amnistía Internacional ha denunciado también esas condiciones del encarcelamiento de González. «Lo que nos preocupa y lo que estamos denunciando es que han pasado dos años y sigue encarcelado en régimen de aislamiento, en un régimen muy severo, donde está 23 horas en una celda«.
Una privación de libertad injustificada.
El caso de Pablo González es de esos que hacen historia. Las garantías procesales no se están cumpliendo y la opacidad en las investigaciones es latente. Una familia está sufriendo injustamente y además se está dando un atentado total frente a la libertad de prensa, hasta que la Justicia no diga lo contrario, un inocente está sufriendo un absoluto martirio.
