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Pocos días después de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, Tulsi Gabbard propuso un inusual plan de paz. En un video, Gabbard llamó a priorizar el bienestar del pueblo ucraniano y propuso que Ucrania adoptara una postura neutral, sin alianzas militares con la OTAN ni con Rusia, lo que según ella atendería las preocupaciones de seguridad tanto de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN como de Rusia.
La propuesta, evocada bajo su llamado «espíritu de aloha» fue vista por muchos como alineada con los intereses del Kremlin. Por entonces, Gabbard, exdiputada demócrata, ya había sido criticada y repudiada públicamente por su propio partido, que la tildó de ser «un altavoz de Moscú.»
El rol del director nacional de inteligencia
El cargo de director de inteligencia nacional, creado en 2004 tras las fallas de coordinación entre agencias antes del 11-S, es el puesto más alto en inteligencia en Estados Unidos. Supervisando la comunidad de inteligencia, que incluye la CIA, NSA y el FBI, su función es asesorar directamente al presidente en asuntos de seguridad nacional. Hasta ahora, el puesto ha sido ocupado por siete personas, dos de ellas mujeres designadas por el presidente Joe Biden, y cualquier candidato al cargo requiere confirmación por mayoría simple en el Senado.
Controversias con Hillary Clinton y la demanda por difamación
Conocida en Washington como “Tulsi”, presentó una demanda por difamación contra Hillary Clinton en 2020 luego de que esta sugiriera que Gabbard estaba siendo favorecida por Rusia como candidata de un tercer partido, e incluso insinuara que podría ser un «topo ruso». Aunque perdió en las primarias demócratas en 2020 frente a Joe Biden y Kamala Harris, después dio su apoyo a Trump. En su demanda, alegó que Clinton mentía sobre sus vínculos con Rusia y que estos comentarios le habrían causado daños de más de 50 millones de dólares. La exdiputada retiró finalmente la demanda, argumentando que, aunque consideraba legítimas sus reclamaciones, prefería enfocarse en otras prioridades debido a la pandemia.
Declaraciones sobre laboratorios en Ucrania y la expansión de teorías conspirativas
En medio de la invasión rusa, Gabbard afirmó que Estados Unidos financiaba laboratorios biológicos en Ucrania y sugirió, en un video publicado en redes sociales, que estos laboratorios podrían estar relacionados con enfermedades como el COVID-19. Más tarde aclaró que solo pretendía señalar la existencia de dichos laboratorios. Sin embargo, estas declaraciones fueron rápidamente utilizadas por medios rusos y chinos, y se asociaron con teorías conspirativas.