El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha prometido a sus socios de EH Bildu impulsar los servicios de las radios comunitarias, que, según algunas fuentes, funcionan como plataformas que los proetarras utilizan a nivel local para difundir propaganda, extender su red de influencias y homenajear a terroristas y líderes de ETA, muchos de los cuales han estado involucrados en asesinatos.
La portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, ha confirmado el apoyo del Ejecutivo de Sánchez. A través de una respuesta parlamentaria por escrito, el Gobierno se ha comprometido a hacer todo lo posible para cumplir esta demanda de las radios comunitarias. Esto ha generado preocupación en los partidos de la oposición, ya que se ha señalado que mientras Sánchez planea impulsar una ley de censura para los medios de comunicación, parece eximir a las plataformas utilizadas por grupos proetarras de cualquier tipo de censura.
Esta propuesta llega en un contexto donde la prensa ha revelado presuntos delitos de malversación y corrupción vinculados a Begoña Gómez, esposa del presidente, lo que ha levantado sospechas sobre las intenciones del Gobierno al respecto.
Aizpurua también recordó al Gobierno que ya se había vencido el plazo establecido en la disposición transitoria tercera de la Ley 13/2022, de 7 de julio, General de Comunicación Audiovisual (LGCA). Según esta ley, las emisoras sin ánimo de lucro que acrediten un funcionamiento ininterrumpido durante los últimos cinco años, sin causar problemas de interferencias, pueden solicitar la concesión del título habilitante a la autoridad audiovisual autonómica competente, en función de la disponibilidad del espectro radioeléctrico, tal como lo ha informado OKdiario.
EH Bildu quiere que Sánchez financie sus radios comunitarias
Aunque Mertxe Aizpurua llamó la atención del Ejecutivo porque los plazos establecidos en la Ley General de Comunicación Audiovisual de 2022 para dar voz a las radios proetarras no se han cumplido, pidió al Gobierno que explicara a su partido, EH Bildu, cómo iba a ejecutar dicha ley. En particular, exigió detalles sobre cómo se iba a reservar el dominio público radioeléctrico necesario para la prestación de estos servicios.
Este señalamiento subraya la preocupación de EH Bildu por la falta de avances en la implementación de la ley, que contempla la posibilidad de que emisoras sin ánimo de lucro, incluidas las que tienen vinculación con el ámbito proetarra, puedan acceder al espectro radioeléctrico y operar de manera oficial.
Ante esta pregunta parlamentaria, el Gobierno señaló que: “es necesario abordar la modificación del Plan técnico nacional de radiodifusión sonora en ondas métricas con modulación de frecuencia, contemplando esta nueva tipología de estaciones y, conforme a las disponibilidades de espectro radioeléctrico, realizar las reservas de frecuencias para la prestación de estos servicios”.
Una de estas radios comunitarias que forma parte del entramado es Eguzki Irratia, la cual, según denunció en su momento el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite), rindió homenaje en 2021 al etarra fallecido Josu Olabarria. Este homenaje fue criticado por Covite, que está presidido por Consuelo Ordóñez, hermana de Gregorio Ordóñez, concejal del PP asesinado por la banda terrorista en 1995. La acción de Eguzki Irratia ha sido señalada como un ejemplo del uso de estas emisoras para glorificar a figuras vinculadas al terrorismo, lo que ha generado un fuerte rechazo en sectores de la sociedad y en la política.
