Imagen: José Luis Ábalos
El exministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha solicitado su readmisión en el PSOE como militante mediante una carta enviada el pasado viernes a la Comisión Ejecutiva Federal del partido. En esta misiva, Ábalos pide que se deje sin efecto la suspensión cautelar de su militancia, la cual fue acordada tras hacerse pública su presunta implicación en el caso Koldo. En la carta, Ábalos, que firma como “ex secretario de Organización”, solicita formalmente recuperar todos sus derechos políticos como afiliado.
Ábalos argumenta que el expediente interno en su contra se abrió el 27 de febrero, y que desde entonces ha estado completamente paralizado, sin que se haya emitido pliego de cargos alguno, lo que, según él, dificulta el ejercicio de sus derechos políticos.
Suspensión de la militancia de Ábalos
La decisión del PSOE de apartar a José Luis Ábalos se tomó después de que el exministro se negara a renunciar a su escaño en el Congreso de los Diputados y pasara al Grupo Mixto. La formación de Pedro Sánchez le había solicitado que diera un paso atrás, subrayando que el compromiso del partido contra la corrupción es inequívoco.
En un comunicado, el partido explicó que había tomado esta decisión para depurar la responsabilidad política de Ábalos en los contratos de compra de material sanitario que están siendo investigados. El objetivo de esta medida era proteger la imagen del partido.
Relación de Ábalos con el PSOE
Este escrito se presenta en un momento en el que las relaciones entre Ábalos y el PSOE son más tensas que nunca, después de que el Ministerio de Transportes publicara una auditoría sobre el periodo en que el diputado ostentó el cargo.
Tras la publicación de la auditoría, el exministro José Luis Ábalos declaró en una entrevista con El Español que ya no será seguidista del PSOE y que decidirá en cada momento qué hacer con su voto. Advirtió al gobierno que ya no podrá dar por seguro que votará de la misma manera que los diputados del grupo socialista, como lo había hecho hasta ahora. “Ahora votaré en conciencia”, sentenció Ábalos.
Esta nueva postura de Ábalos complica aún más los delicados respaldos que tiene el gobierno de coalición para sacar adelante sus medidas, como la reforma de la ley de financiación autonómica. Esta reforma es clave para hacer efectiva la “financiación singular para Cataluña” y cumplir con el acuerdo alcanzado con ERC para hacer a Illa president.