La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha solicitado la dimisión “en bloque” del Gobierno de Pedro Sánchez tras conocerse las revelaciones del empresario Víctor de Aldama en el marco del caso Koldo.
En una rueda de prensa cargada de críticas, Ayuso calificó de “imprescindible” y “urgente” que el Ejecutivo asuma responsabilidades ante lo que considera «un recital de delitos» relacionados con corrupción y tráfico de influencias.
“Estamos hablando de sobres, pagos en billetes, lingotes de oro, negociaciones de contratos, reuniones que Pedro Sánchez y su mujer, Begoña Gómez, han negado, pero que ahora quedan expuestas”, denunció Ayuso. La presidenta madrileña cuestionó la tolerancia del electorado hacia estos hechos, afirmando: “Si a estas alturas la izquierda cree que todo vale con tal de que no gobierne la derecha, España se ha vuelto loca”.
Ayuso no se mostró optimista respecto a una posible reacción del presidente Sánchez, insinuando que este buscará una nueva estrategia para desviar la atención: “Ahora veremos cuántos días se tomará de receso, votando telemáticamente desde su despacho, para seguir atacando a jueces, fiscales y policías que están haciendo su trabajo”. Además, advirtió que “aún queda muchísimo por ver”.
Por su parte, Víctor de Aldama, empresario investigado en el caso Koldo, ha señalado directamente al presidente del Gobierno, a su esposa, Begoña Gómez, y a varios altos cargos del PSOE y ministerios por su supuesta implicación en una trama de corrupción que incluye el cobro de comisiones y entregas de dinero en efectivo.
De Aldama declara que decenas de ministros del PSOE conocían la llegada de Delcy Rodríguez
Entre las acusaciones más graves, Aldama afirmó haber entregado 15.000 euros al secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, a través de Koldo García, asesor del exministro José Luis Ábalos, en un bar cercano a la sede del partido.
El empresario también implicó a Teresa Ribera, vicepresidenta tercera del Gobierno y futura vicepresidenta de la Comisión Europea, asegurando que mantendría varias reuniones con ella relacionadas con proyectos para la “España vaciada”.
Según Aldama, Begoña Gómez también participó en una de estas reuniones debido a su interés por los negocios de una filial de Globalia, Wakalua Hub. Además, Aldama declaró que entregó más de 400.000 euros en comisiones al exministro Ábalos y más de 200.000 a Koldo García, sumas que, según explicó, provenían del sector de la construcción.
Los pagos se habrían realizado en lugares como su oficina o, en ocasiones, directamente en el Ministerio de Transportes. Las confesiones de Aldama, que también incluyen una fotografía junto al presidente Sánchez en un acto electoral, han intensificado la presión política sobre el Gobierno.