Ya son tres los barcos que desde Podemos y organizaciones afines se han señalado por llevar a bordo armas con destino a Israel. Los tres renunciaron a hacer escala en España. Pero lo que más preocupa en el Ministerio de Defensa, detonante que ha provocado un enfado considerable de Israel con España, es que la información sobre su carga es estrictamente confidencial y ha terminado siendo de dominio público.
Se está investigando de forma interna si los documentos de la carga de estos buques pudieron llegar a manos del ex JEMAD José Julio Rodríguez y, en ese caso, quién se los pudo facilitar. La pregunta que más perturba al Ministerio de Defensa es cómo Podemos y algunas organizaciones contrarias a la cuestión de Israel tuvieron acceso a los manifiestos de carga, que no son públicos, de los buques que llevaban armamento a Israel.
Cabe destacar que el Ministerio de Transportes es uno de los encargados de mantener la confidencialidad de la hoja de ruta de estos buques. Según distintas fuentes, Defensa está investigando la posibilidad de que haya sido una filtración lo que permitió a Podemos y dichas organizaciones conocer cuáles eran los buques y la ruta que llevaban para posteriormente denunciarlo.
Asimismo, se está intentando acotar el terreno sobre personas que hayan tenido relación con el ex JEMAD Rodríguez, fichado por Pablo Iglesias y que en los últimos meses se ha mostrado especialmente crítico con Israel.
El ministerio de Óscar Puente tiene la obligación de mantener la confidencialidad de la ruta de los barcos
Por ello, explican, el buque no se arriesgó a entrar en el puerto de Cartagena y quedar bloqueado por la denuncia judicial presentada por Podemos. Aquel primer intento por interceptar el buque supuso el inicio de una investigación: alguien había filtrado documentos de la operación mercante del Borkum, información confidencial que podía poner en riesgo al buque, su carga y su tripulación.
Se sospechó en un primer momento que la filtración podría provenir del puerto de Las Palmas, ya que las fechas de su escala y la publicación en medios de izquierda de los documentos de su carga coincidían. Sin embargo, cuando ya han sido tres los buques que se han visto obligados a evitar puertos españoles las alarmas se han encendido en Defensa. No fue algo puntual, sino que la información ha seguido fluyendo hacia Podemos «y suele ser muy certera», explican.