Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular (PP), presentó un ambicioso plan de financiación durante su campaña electoral con el objetivo de resolver la histórica disputa financiera entre las comunidades autónomas de España. A pesar de no haber alcanzado la Moncloa, Feijóo retoma este proyecto desde la oposición, buscando ofrecer una alternativa a los planes del actual gobierno liderado por Pedro Sánchez, que pretende dar una financiación especial a Cataluña sin convocar al Consejo de Política Fiscal y Financiera.
El enfoque del PP parte de la premisa de que cada territorio tiene sus propias necesidades y particularidades, por lo que los criterios de reparto de fondos deben ser técnicos y no políticos. Una de las principales medidas del plan es la creación de un criterio de población ajustada. Este criterio busca analizar exhaustivamente los datos de cada territorio, considerando factores como la natalidad, el número de jubilados y la dispersión de los servicios básicos, para determinar de manera precisa las necesidades de financiación de cada comunidad.
Además, el PP propone una reformulación de los fondos Next Generation para que las comunidades autónomas puedan destinar las ayudas europeas según las necesidades específicas de su población, en lugar de seguir las directrices impuestas por el Gobierno central. Esta propuesta busca evitar situaciones como las mencionadas por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien reprochó a Juan Bravo, vicesecretario de Economía del PP, por la devolución de fondos debido a la falta de flexibilidad en su uso.
Plan de compensación de los gastos asumidos por las comunidades autónomas.
Otro aspecto relevante del plan es la compensación de los nuevos gastos asumidos por las comunidades autónomas, ya sea por transferencias de competencias o por aceptar responsabilidades adicionales, como la acogida de inmigrantes. El PP exige que el Gobierno devuelva a las comunidades la parte correspondiente de estos gastos y propone premiar a aquellas que cumplan con los objetivos marcados, como podría ser la mejora de los índices de vivienda.
El PP también pone énfasis en los retos futuros, diseñando fórmulas que tengan en cuenta la evolución de la población en cada comunidad. Esto incluye la creación de un fondo para fomentar la natalidad, las pensiones y la sanidad. Además, el plan exige que el Gobierno respete la autonomía de los territorios, permitiendo, por ejemplo, que las comunidades decidan sobre la eliminación de impuestos como el de sucesiones.
En términos de metodología, el equipo de Feijóo critica la falta de consenso del Gobierno actual en la distribución de fondos entre los territorios. Destacan que, a diferencia del PSOE, el PP busca un enfoque multilateral, recordando cómo durante el gobierno de Mariano Rajoy se reunieron todas las comunidades para consensuar una reforma del sistema de financiación, un plan que no se pudo implementar debido a la moción de censura contra Rajoy.
