Yolanda Díaz, ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda del Gobierno, ha firmado este viernes un acuerdo con el fin de reducir la jornada laboral a 37,5 horas. Este acuerdo ha contado con la participación de los secretarios generales de CCOO, Unai Sordo, y de UGT, Pepe Álvarez.
Juan José Álvarez, secretario de organización de Asaja, dice que la reducción de la jornada supone una “subida encubierta” del salario e implicará “tener que contratar a más gente” y, por consiguiente, un “incremento de los costes”.
Álvarez ha lamentado que el sector está acostumbrado a que se le “deje de lado” y ha pedido al Gobierno que ponga en marcha un plan de apoyo financiero para asumir la medida.
Por su lado, Andrés Góngora, portavoz de COAG, ha advertido que el sector agrario se ve «muy condicionado» por el clima, algo que, a su juicio, se debería tener en cuenta a la hora de legislar sobre las jornadas laborales para adaptarse a las necesidades del campo.
Andrés Góngora ha demandado una mayor “flexibilidad” sobre todo, con las dificultades que puede tener el campo y en concreto sectores como el hortofrutícola a la hora de aplicar la medida, además de pedir que se tenga en cuenta la propia temporalidad que caracteriza al sector.
El secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, ha celebrado la medida ya que «los trabajadores están en su derecho de reivindicar mejores condiciones», a la vez que ha pedido que se mejoren las condiciones en los productores para que se les permita “pagar sin problemas”.
Yolanda Díaz no tiene en cuenta las necesidades del sector de la agricultura
La reducción de la jornada laboral supondrá “aumento de los costes laborales”, ha asegurado Cortés durante su intervención tras la reunión de seguimiento de las 43 medidas para el campo mantenida con UPA y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
La duración de la jornada de trabajo será la pactada en los convenios colectivos o contratos de trabajo, siempre que tenga en cuenta una duración máxima de la jornada ordinaria de 37,5 horas semanales de promedio en cómputo anual.
Esta medida impulsada por Yolanda Díaz no ha sido bien recibida por la Confederación Española de Organizaciones Empresariales, CEOE. Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, se ha mostrado contrario a la implementación de la reducción de jornada laboral desde el primer momento que la líder de Sumar puso sobre la mesa esta medida.
La cuestión que destaca Garamendi y empresarios de la CEOE es que con la reducción de la jornada laboral las empresas deberán hacer frente a una reducción de la productividad. Así mismo, deberán afrontar el pago de costes extra para igualar los resultados de producción que había anteriormente.