Hoy ha tenido lugar la primera sesión de control en el Congreso de los Diputados después de la renovación del Consejo General del Poder Judicial, tras cinco años de bloqueo judicial. Esta renovación ha sido posible tras un acuerdo entre el PP y PSOE que tuvo lugar en Bruselas y con la mediación de la Comisión.
El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha abierto la sesión de control asegurando que hace “exactamente nueve meses” en su discurso de investidura “concreté cuáles eran los compromisos de mi partido para ordenar el CGPJ”. Dichas obligaciones “en su mayoría están concretados en el acuerdo de ayer”. Por otro lado, Feijóo ha recordado que entonces, “aquel discurso y aquella propuesta” fueron votados a favor por “UPN, Coalición Canaria, Vox y, por supuesto, el partido mayoritario”.
A lo largo de su intervención, Feijóo se ha dirigido a Pedro Sánchez para hacerle una pregunta y que ha causado los aplausos de los miembros del Partido Popular: “Usted dijo en la última sesión de control que el PP es un partido de extrema derecha. Ahora que ha pactado el acuerdo, ¿se ha vuelto usted de extrema derecha?” El presidente del Gobierno no ha dudado en responder a esta cuestión, aunque de manera más neutral, ya que le ha dado la bienvenida “al acuerdo y al cumplimiento de la Constitución española”. También ha querido aclarar que, aunque el PSOE sea un gobierno “en minoría parlamentaria, es un gobierno de acuerdos”.
Pedro Sánchez confirma que agotará la legislatura
Pedro Sánchez también ha señalado que: “Todos aquellos que han querido pactar con el gobierno de España han encontrado siempre la mano tendida del gobierno de España: los agentes sociales, los sindicatos y la patronal, la comunidad educativa, la comunidad científica, los gobiernos autonómicos, los partidos políticos a nivel europeo y con los grupos parlamentarios de esta cámara”.
También ha afirmado que este acuerdo entre el PSOE y PP que llevaba cinco años bloqueado es “motivo para felicitarse”, debido a que considera que es “bueno para los ciudadanos, para las empresas, la economía española”, además de que “traerá seguridad jurídica” y supone “el buen nombre y la reputación del poder judicial”. Al final de su intervención, Sánchez ha querido dejar claro que “quedan tres años por delante de legislatura”, y, por este motivo, quedan también “muchos acuerdos por alcanzar”.