La eurodiputada en el Parlamento Europeo de Podemos, Irene Montero, ha participado por segunda vez como colaboradora en el programa de Risto Mejide ‘Todo Es Mentira’.
A lo largo del programa debatieron acerca del 41º Congreso Federal del PSOE, celebrado este fin de semana en Sevilla. Así, el programa se centró en la enmienda aprobada por el PSOE para mantener el término LGTBI y eliminar las siglas “Q+” del ideario del partido. Irene Montero mostró su desencanto con la decisión del PSOE.
Posteriormente, se trataron las nuevas informaciones que han salido a la luz sobre el presunto delito de filtración de documentación y datos privados de la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Alberto González Amador. La exministra de Podemos y el periodista del ‘ABC’, Javier Chicote, se enzarzaron en una discusión.
Montero acusó a Chicote de haber difundido «información falsa» en sus artículos, una imputación que el periodista rechazó tajantemente, optando por no guardar silencio ante la acusación. La exministra exigió al periodista que presentara las supuestas pruebas que respaldarían la ya desmentida acusación sobre la financiación de Podemos.
Distintos medios han señalado que la financiación del partido morado procede de Venezuela. Chicote le respondió que a él en ningún momento nadie de Podemos le había interpuesto una demanda y que la única condenada por publicar informaciones falsas era ella, después de acusar a un hombre en redes sociales de haber abusado de su hijo.
Irene Montero condenada por acusar falsamente de maltratador a un padre
“Te condenó hasta el Tribunal Supremo. ¿Has pagado ya tu condena?”, espetó con ira el periodista de ‘ABC’, a lo que la eurodiputada afirmó que ya lo había hecho, pero que había recurrido la sentencia al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Asegurando así, que defendió los “derechos de las madres protectoras frente a los poderes mediáticos que las criminalizan”, afirmando que defendió “un indulto que hizo el Gobierno”.
Hay que recordar que Irene Montero fue condenada a indemnizar con 18.000 euros a un hombre al que acusó de ser un maltratador. Los jueces consideraron que la ministra vulneró el derecho al honor de este hombre, expareja de María Sevilla, expresidenta de Infancia Libre condenada y posteriormente indultada, al afirmar que era un maltratador cuando no había sido condenado.
La Sala de lo civil del Supremo señaló: “Es evidente que las palabras proferidas y la imputación realizada suponen objetivamente un daño moral, como sinónimo de malestar, desasosiego e incluso indignación, en el marco, además, de un largo proceso judicial sufrido por el demandante”.