La ciudad autónoma de Ceuta se encuentra alerta tras el anuncio de un séptimo intento de asalto masivo a la frontera, previsto para el 30 de septiembre. Después de seis intentos frustrados en las últimas semanas, los servicios de seguridad españoles y marroquíes se preparan para otro posible intento de inmigración irregular, convocado nuevamente a través de las redes sociales.
Los Harraga
El grupo que lidera estos intentos masivos es el movimiento conocido como «Harraga», compuesto en su mayoría por jóvenes marroquíes y argelinos que buscan llegar a Europa en busca de un futuro mejor. A través de plataformas como TikTok y Facebook, los organizadores han difundido mensajes con consignas claras y agresivas, alentando a sus seguidores a no tener miedo de las fuerzas de seguridad y a persistir en sus intentos de cruzar la frontera.
El término Harraga, que proviene del árabe y significa «los que queman», hace referencia a los jóvenes que queman sus documentos de identidad antes de intentar entrar ilegalmente a Europa, con el objetivo de evitar ser identificados y deportados. Estos jóvenes, la mayoría menores de edad o en situación de desempleo, conocidos como NEET (sin empleo, educación o formación), ven en la inmigración clandestina una vía de escape ante la falta de oportunidades en sus países de origen.
Nuevo operativo de seguridad
Tras el asalto fallido del pasado 15 de septiembre, en el que casi medio millar de jóvenes fueron contenidos por las fuerzas marroquíes, las autoridades se preparan para un operativo similar este lunes. El dispositivo incluirá a la Guardia Civil, la Policía Nacional, y el Grupo de Reserva y Seguridad, todos coordinados para prevenir el ingreso masivo de inmigrantes a Ceuta tanto por tierra como por mar.
Las fuerzas marroquíes, por su parte, han jugado un papel crucial en los últimos intentos, desplegando unidades del Ejército y la Gendarmería para bloquear el acceso a las playas cercanas y evitar que los migrantes lleguen hasta la frontera española. La colaboración entre Marruecos y España ha sido clave en frenar estas oleadas de inmigración, con las autoridades marroquíes arrestando a miles de personas en los intentos previos. Entre el 11 y el 15 de septiembre, Marruecos informó la detención de más de 4.455 personas que intentaban cruzar la frontera, la mayoría siguiendo los llamamientos de los Harraga.
El nuevo asalto, previsto para el 30 de septiembre, las autoridades se preparan para lo que podría ser otro intento coordinado de cruzar la frontera por mar, utilizando el espigón de Benzú o la zona de Castillejos, así como por tierra, donde los migrantes podrían intentar saltar la valla fronteriza.
La vigilancia en las costas ha sido reforzada, especialmente en la playa del Tarajal, donde se han registrado numerosos intentos de ingreso en el pasado. Sin embargo, se teme que si los migrantes no logran cruzar por mar, opten por forzar el paso a través de la valla, lo que generaría un aumento en la confrontación directa con las fuerzas del orden.
Las autoridades marroquíes han intensificado las detenciones de quienes incitan a la inmigración ilegal a través de las redes sociales. En los últimos días, 60 personas han sido arrestadas bajo la acusación de organizar y promover operaciones masivas de cruce ilegal hacia Ceuta. Estas detenciones incluyen a trece individuos capturados en diversas ciudades marroquíes y otros interceptados en rutas hacia Tánger, desde donde planeaban dirigirse a la frontera.
Las fuerzas de seguridad siguen investigando el origen de estos llamamientos masivos y esperan poder identificar a los cabecillas del movimiento. El objetivo es frenar la organización que, según indican las fuentes, parece cada vez más sofisticada y orientada a generar caos en la frontera española.