Pere Aragonès, actual presidente de la Generalitat de Cataluña, ha abordado de manera delicada la reciente polémica con Carles Puigdemont, expresidente de Cataluña. En una comparecencia desde la galería Gòtica del Palau de la Generalitat, Aragonès ha optado por no profundizar en el conflicto con Puigdemont, que ha sido objeto de una controversia ya alargada.
Carles Puigdemont, quien se encuentra en el exilio, había enviado una carta en la que responsabilizaba a Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), el partido de Aragonès, de su posible detención y exigía una rectificación. Puigdemont alegaba que las acciones de ERC podrían haber influido negativamente en su situación legal. En su carta, Puigdemont consideraba que esta responsabilidad atribuida por él a ERC era una ofensa.
En respuesta a estas acusaciones, Aragonès ha preferido no entrar en una confrontación directa con Puigdemont. En su comparecencia, ha limitado su respuesta a desear que Puigdemont pueda regresar «en plena libertad», sin profundizar en el conflicto personal o político.
De manera implícita, Aragonès ha recordado que la responsabilidad de aplicar la ley de Amnistía recae en el Tribunal Supremo, y no en ERC ni en el gobierno catalán. Ha subrayado que “las leyes se tienen que cumplir también por parte de los tribunales” y que el Supremo es quien tiene la autoridad para tomar decisiones legales sobre este asunto.
El president en funciones, Pere Aragonès, no se ha pronunciado sobre la posibilidad de aplazar el pleno de investidura de Salvador Illa, previsto para el jueves, en caso de que Carles Puigdemont sea detenido. Aragonès ha indicado que su prioridad en estos momentos es asegurar una transición ordenada en la presidencia de la Generalitat y mantener la continuidad institucional.
Sin embargo, dentro de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) está ganando fuerza la opción de suspender el pleno de investidura para retomarlo posteriormente si es necesario. Tanto Junts como los comunes ya han manifestado su apoyo a esta posibilidad.
Pere Aragonès ha afirmado que el PSOE y el PSC han aceptado «prácticamente íntegramente» la propuesta de financiación presentada por el Govern de Cataluña. Según Aragonès, el final de su mandato marca el comienzo de una nueva etapa con importantes desafíos, pero también con oportunidades que todos deberán aprovechar.
Para el republicano el final de su Govern implica el preludio de una nueva etapa llena de retos
Durante su tiempo en el Govern, Aragonès ha enfatizado el enfoque en la negociación y el diálogo para resolver conflictos políticos con el Estado. Ha destacado que se ha logrado un aumento en las cuotas de autogobierno y poder político en Cataluña, el más significativo en los últimos 18 años.
Aragonès ha subrayado logros clave de su mandato, como la obtención de indultos, la eliminación del delito de sedición del Código Penal y la ley de amnistía, considerando estos avances como resultados directos del proceso de negociación durante su gobierno.