El PNV y el PSE-EE han alcanzado un acuerdo programático para el próximo Gobierno vasco de coalición, con Imanol Pradales del PNV como «lendakari». Ambas formaciones han comunicado en notas idénticas que este acuerdo ha sido presentado a las direcciones de los partidos para su ratificación por los órganos internos correspondientes. La sesión de investidura de Pradales se llevará a cabo el jueves 20 de junio, y se espera que sea elegido con mayoría absoluta en la primera votación. La jura del cargo tendrá lugar el sábado 22 de junio en la Casa de Juntas de Gernika (Bizkaia).
El documento del acuerdo se estructura en cinco capítulos: Personas en el centro (políticas sociales), Modelo de Crecimiento, Transformación energética y sostenibilidad, Convivencia, memoria y derechos humanos, y Crecer en Autogobierno. El capítulo sobre autogobierno es particularmente significativo, ya que ambos partidos se comprometen a completar el actual Estatuto de Gernika y a establecer las «bases para un nuevo pacto estatutario» que partirán del acuerdo entre el PNV y el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez.
El preacuerdo de 11 páginas, titulado «Bases para el Acuerdo para avanzar en bienestar, progreso, autogobierno y la transformación de una Euskadi global», se centra en principios y objetivos generales y no constituye un programa de gobierno detallado. No se especifica el número de departamentos del próximo Gobierno vasco ni el reparto de carteras entre los socios. El texto indica: «Somos conscientes del carácter clave de esta legislatura para construir la Euskadi del futuro. Nos proponemos mejorar el nivel de bienestar de toda la ciudadanía, garantizar el progreso y la cohesión social, consolidar y profundizar nuestro sistema singular de autogobierno a través de un nuevo Pacto Estatutario«.
El documento también incluye un apartado de Convivencia que abarca la «deslegitimación de la violencia, reconocimiento integral de todas las víctimas de vulneraciones de derechos, construcción de una memoria inclusiva, crítica y ética, y promoción de principios y valores éticos y democráticos». Asimismo, se destaca la intención de «seguir impulsando una memoria crítica del pasado, tanto histórica como reciente, y promover una cultura social y política de respeto a los derechos humanos».
Ambos partidos expresan una valoración «positiva» de su anterior Ejecutivo de coalición y reconocen que este nuevo acuerdo se basa en el pactado en 2020. Además, buscan pactar con otros partidos y agentes sociales para consolidar y reforzar el proyecto político.