El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, retoma su presencia en el pleno del Congreso de los Diputados esta semana tras la pausa estival, Sánchez se enfrenta a una crisis diplomática con Venezuela, debates candentes sobre financiación autonómica y la presión de la inmigración en la agenda política.
Crisis diplomática con Venezuela
El regreso de Sánchez al hemiciclo coincide con las tensiones entre España y Venezuela. La crisis se desató después de que el Gobierno de Nicolás Maduro convocara al embajador español en Caracas y llamara a consultas a su representante en Madrid. Esta medida respondió a unas declaraciones de la ministra de Defensa, Margarita Robles, que el régimen venezolano interpretó como una intromisión en sus asuntos internos.
La situación se agravó aún más con la reciente aprobación en el Congreso de una proposición no de ley del Partido Popular , que instó al Gobierno a reconocer a Edmundo González Urrutia como presidente legítimo de Venezuela. Esta resolución será objeto de una nueva votación en el Senado esta semana, donde se prevé que la propuesta reciba el respaldo de la mayoría popular. El texto también exige que el Gobierno considere sanciones específicas contra los dirigentes venezolanos y solicite al Tribunal Penal Internacional una orden de arresto contra Nicolás Maduro por crímenes de lesa humanidad.
Financiación autonómica e inmigración
La financiación autonómica será uno de los temas centrales del pleno, con el PP y ERC planteando preguntas sobre la ejecución de los acuerdos sobre financiación catalana. ERC, en particular, presionará al Ejecutivo para que cumpla el pacto alcanzado con el PSC para una financiación singular para Cataluña.
El PP también se centrará en la crisis migratoria, un tema preocupante tras los recientes acontecimientos y las negociaciones del Gobierno canario con el Ejecutivo central y el propio PP durante el pasado agosto. Santiago Abascal, líder de Vox, aprovechará la ocasión para centrar su intervención en la inmigración ilegal, mientras que el PP preguntará a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, sobre los aspectos relacionados con la crisis migratoria y los posibles acuerdos en esta materia.
Junts, por su parte, cuestionará la cesión de competencias en temas de inmigración a Cataluña, especialmente en lo que respecta al control de fronteras. El ministro Marlaska ha advertido que el control de fronteras es una competencia exclusiva del Estado.
En el Senado, la semana será igualmente intensa. Se celebrará el tercer pleno ordinario de septiembre, con una sesión de doble jornada que incluye una nueva proposición de ley del PP. Esta decimotercera propuesta legislativa del partido aborda la protección del patrimonio histórico frente al vandalismo. Sin embargo, el debate más esperado será el relativo al reconocimiento de Edmundo González Urrutia como presidente legítimo de Venezuela, programado para el miércoles.
Además, se discutirá una moción del PP sobre financiación autonómica, junto con propuestas de Vox sobre inmigración y del PSOE sobre racismo y xenofobia. El martes por la tarde, los ministros comparecerán ante los senadores en una sesión de control del Gobierno a la que, nuevamente, Sánchez y la vicepresidenta Montero estarán ausentes.
