En cada ciclo electoral estadounidense, las campañas presidenciales son una de las partes más caras de la carrera a la Casa Blanca. Anuncios publicitarios, mítines multitudinarios o visitas a los estados clave para convencer a indecisos son un punto clave en cualquier campaña presidencial. A medida que se acercan las elecciones, la recaudación de fondos se intensifica y los candidatos buscan asegurarse el respaldo de los donantes más poderosos, cuyas contribuciones llegan a suponer cifras astronómicas. Estos donantes, a parte de aportar grandes sumas de dinero, ejercen también una influencia considerable sobre las prioridades y políticas de los candidatos que apoyan.
Algunos multimillonarios hacen contribuciones públicas, como Elon Musk, quien ha prometido incluso premios diarios de un millón de dólares para votantes en los estados calientes. Mientras tanto, otras figuras, como Bill Gates, se decantan por organizaciones de “dinero oscuro” que no revelan a sus donantes pero que le permite mostrar su apoyo.
Pese a haber empezado más tarde, la campaña de la vicepresidenta Kamala Harris ha dado a los demócratas una gran ventaja en la recaudación de fondos: su campaña ha recibido casi tres veces más dinero que la de su contrincante, el expresidente y candidato republicano Donald Trump.
Kamala Harris bate récords
El primer día efectivo como aspirante a la presidenta, Kamala Harris ya había logrado una cantidad superior a los 100 millones de dólares (92 millones de euros). Según la consultoría progresista MiddleSeat, se trata de “la mejor recaudación en la historia del partido demócrata”.
Dejando de lado los donantes multimillonarios, el éxito se debió en buena parte al grupo de mujeres donantes que durante décadas la han acompañado en su carrera. Incluso cuando Harris seguía insistiendo en que Joe Biden sería el candidato del partido, estas fieles aliadas empezaron a mover ficha para asegurarse de que su campaña no partiera de cero. Esa cantidad se suma los 96 millones de dólares que Biden ya atesoraba en las arcas de la campaña.
A su vez, Donald Trump declaraba haber recaudado más de 50 millones de dólares en las 24 horas que siguieron a su condena por el caso Stormy Daniels, el 30 de mayo. Biden cosechó a finales de marzo más de 25 millones en un solo acto, en Nueva York, y 38 millones en los cuatro días posteriores a su desastrosa actuación en el debate que le enfrentó a Trump el 27 de junio.
Pero sin duda, el récord absoluto lo ostenta Harris, a la que han arropado importantes donantes de Wall Street, Silicon Valley -con el multimillonario Reid Hoffman a la cabeza, aunque otros grandes nombres de las Big Tech como Elon Musk se han rendido a Trump- y Hollywood. El total incluye también donaciones modestas, de cientos de miles de nuevos donantes espoleados por el recambio. Y en un lugar preeminente, las donantes de la denominada área de la bahía, como se conoce a San Francisco, que han construido la plataforma para el gran salto.
A medida que las elecciones se acercan, la importancia de estas donaciones se vuelve aún más evidente, tal como queda reflejado en las cifras de recaudación. En el ciclo electoral de 2024, el Partido Demócrata ha recaudado aproximadamente 1.203 millones de dólares (alrededor de 1.090 millones de euros).
Según un análisis de datos de la Comisión Federal de Elecciones (FEC) realizado por Open Secrets, los donantes ultrarricos representan aproximadamente el 8,5% de los 6.300 millones de dólares de contribuciones económicas a ambos partidos registradas hasta el 17 de septiembre.
Tal como indica la mencionada página web, Harris ha recaudado cerca de 685 millones de dólares mediante su comité de campaña, además de alrededor de 336 millones de dólares que provienen de grupos de interés y comités de acción política que apoyan su candidatura de forma independiente.
Los donantes multimillonarios de Kamala Harris
Importantes donantes demócratas, de los capaces de extender un cheque de siete u ocho cifras y que apoyaban sin reservas a Biden, se sumaron inmediatamente a la candidatura de Harris.
Reid Hoffman
Cofundador de Linkedin, Reid Hoffman ha sido un importante donante demócrata desde la elección de Donald Trump en 2016. Además de movilizar su propia riqueza, ha logrado reunir a otros empresarios de Silicon Valley, convirtiéndose en una figura influyente dentro del círculo de donantes del partido.
George Soros y Alex Soros
La familia Soros ha sido una constante en las donaciones demócratas. George Soros, un inversor y filántropo húngaro-estadounidense, ha apoyado históricamente a grupos orientados a generar cambios a largo plazo en áreas como derechos humanos, justicia social y reforma electoral. Su hijo, Alex Soros, ha intensificado su participación en la política y se ha posicionado como un aliado estratégico de Kamala Harris.
Mike Bloomerg
A pesar de tener una relación distante con Joe Biden, Mike Bloomerg, exalcalde de Nueva York y fundador de Bloomberg LP, sigue siendo uno de los mayores donantes demócratas. Aunque se espera que sus aportes lleguen más adelante en la campaña, Bloomberg tiene un historial de realizar donaciones significativas en momentos clave previos a las elecciones.
Dustin Moskovitz
Cofundador de Facebook, Dustin Moskovitz es el principal donante de la organización Future Forward, que busca apoyar causas progresistas. Sus esfuerzos se han centrado en financiar organizaciones que promueven causas demócratas como la protección del medio ambiente y los derechos civiles.
Jeffrey Katzenberg
Aunque no posee la misma riqueza que otros grandes donantes, Jeffrey Katzenberg, exejecutivo de Disney y fundador de Quibi (una plataforma de streaming), ha utilizado su red de contactos en Hollywood para recaudar fondos. Como uno de los copresidentes nacionales de la campaña de Harris, su influencia proviene tanto de sus conexiones en la industria del entretenimiento como de su capacidad para movilizar a otros donantes en el sector.
Los apoyos no solo proceden de particulares, también es clave el papel de plataformas demócratas que orientan a los grandes donantes hacia determinadas causas; es decir, de grupos de presión políticos, también dominados por las mujeres. Emily’s List, que agrupa a grandes donantes que defienden el derecho al aborto y que respaldó a Harris durante su vicepresidencia, ofreció contribuir en el acto. Way to Win, un grupo con el mismo objetivo en el que se integran muchas partidarias de Harris, también se volcó con la vicepresidenta.
El origen étnico de Harris también sirve de banderín de enganche. Raj Goyle, un influyente demócrata de origen indio, anunció “un nivel sin precedentes de apoyo surasiático” a la aspirante.
Los donantes de Donald Trump
El Partido Republicano, encabezado por el expresidente Donald Trump, ha contado con un grupo de megadonantes que han impulsado su campaña presidencial para 2024. Según las averiguaciones realizadas hasta el 20 de agosto, 44 donantes habían contribuido con más de 104 millones de dólares (aproximadamente 95 millones de euros) a candidatos y grupos conservadores.
En cifras generales, el Partido Republicano ha recaudado cerca de 922 millones de dólares (unos 840 millones de euros) hasta ahora. De esta suma, ha gastado aproximadamente 751 millones de dólares (cerca de 685 millones de euros), lo que le deja con unos 230 millones de dólares (alrededor de 210 millones de euros) en efectivo disponible. Sus deudas ascienden aproximadamente a 1.3 millones de dólares (cerca de 1.2 millones de euros).
Timothy Mellon
Aunque casi todos los megadonantes aparecen en la lista de personas más ricas de la revista Forbes, no todos son nombres conocidos, como es el caso del mayor donante público de todos, el empresario Timothy Mellon, que ha donado públicamente 172 millones a la campaña republicana. No hay ningún donante que haya gastado públicamente más dinero en favor de Trump en este ciclo que Mellon, descendiente del ex secretario del Tesoro y magnate bancario Andrew Mellon.
Miriam Adelson
La segunda mayor donante, a fecha de menos de dos semanas para las elecciones, es la médica Miriam Adelson, quien ha donado 134,8 millones de dólares a la campaña de Trump contribuyendo a distintos fondos y al súper comité de acción política (PAC) Preserve America.
Adelson, magnate de Las Vegas Sands (grupo de casinos de Las Vegas) con un patrimonio neto de 35.000 millones de dólares ha estado solicitando a otros multimillonarios que ayuden a llevar a Trump a la Casa Blanca y ha recaudado ya varios millones de dólares para su súper PAC en las últimas semanas.
Elon Musk
Elon Musk, la persona más rica del mundo, ha sido en estas elecciones una de las figuras más comentadas desde que mostró su apoyo a Trump en X. Sin embargo, solo es la sexta persona que más ha donado públicamente en esta campaña con 76,3 millones de dólares.
Dick Uihlein y Liz Uihlein
Dick y Liz Uihlein son multimillonarios estadounidenses y propietarios de ULine, una empresa que se especializa en suministros y equipos para negocios. Anteriormente, han sido importantes contribuyentes del ‘Club for Growth’, una organización que promueve políticas económicas conservadoras y que apoya a candidatos que favorecen la reducción de impuestos y el libre mercado.
Linda McMahon
Amiga cercana de Trump y exadministradora de la Agencia de Pequeñas Empresas de Estados Unidos (SBA, por sus siglas en inglés). Además de ser una donante importante, su influencia política se manifiesta en su papel como copresidenta de la transición de Trump, donde trabajó junto a otros grandes donantes como Howard Lutnick, CEO de Cantor Fitzgerald, una importante firma de servicios financieros.