Irán es una república islámica que cuenta con un sistema político complejo, donde el poder está dividido entre diversas instituciones religiosas y civiles. Aunque se celebran elecciones, el sistema no sigue los patrones convencionales de democracias occidentales debido a la labor e influencia del Líder Supremo y el Consejo de Guardianes, que tienen la facultad de vetar a candidatos y leyes.
El sistema político iraní se organiza alrededor de la teocracia islámica, donde el Líder Supremo tiene la mayor autoridad. El Líder Supremo, actualmente el ayatolá Alí Jamenei, supervisa directamente las principales instituciones, incluido el ejército, la judicatura y los medios de comunicación. Además, el Consejo de Guardianes revisa las leyes y selecciona a los candidatos electorales, mientras que el Presidente, electo popularmente, administra el gobierno dentro de las restricciones impuestas por el liderazgo religioso.
En Irán existe una variedad de partidos políticos que representan diferentes corrientes ideológicas dentro del marco de la Revolución Islámica de 1979. Cuenta con un espectro político diverso polarizado entre modernidad y tradición, islamismo y secularismo. Mientras que los reformistas luchan por un cambio gradual hacia una mayor libertad política y social, los partidos conservadores se aferran a los principios fundacionales de la Revolución Islámica.
Partidos de la línea reformista
Movimiento por la Libertad de Irán
Fundado en 1961 por Mehdi Bazargán, el Movimiento por la Libertad de Irán es otro partido reformista que apoya una interpretación más moderada del islam en la vida política. Aunque apoyaron la Revolución Islámica de 1979, siempre mantuvieron una postura crítica hacia el modelo teocrático que se estableció tras la caída del Shah. Este partido aboga por la separación entre el Estado y la religión, aunque reconoce el islam como un componente importante de la identidad iraní.
El Movimiento por la Libertad también promueve una economía mixta, donde el sector privado juegue un papel importante, y defiende los derechos humanos, incluidos los derechos de las minorías étnicas y religiosas en Irán. Sin embargo, debido a su postura crítica hacia la teocracia, ha sido marginado políticamente y muchos de sus líderes han sido encarcelados.
Partido de la Moderación y el Desarrollo
Este partido está asociado con Hassan Rouhani, presidente de Irán entre 2013 y 2021, y representa una corriente moderada dentro de la política iraní. Aunque se le considera parte del movimiento reformista, su enfoque es más pragmático y se centra en las reformas económicas y en mejorar la situación diplomática del país, en lugar de una transformación radical del sistema político. Durante el mandato de Rouhani, el Partido de la Moderación y el Desarrollo fue fundamental para las negociaciones que condujeron al acuerdo nuclear con las potencias mundiales en 2015.
El partido aboga por una mayor integración de Irán en la economía global, la atracción de inversiones extranjeras y la mejora de las relaciones con países occidentales, sin abandonar el control estatal en áreas clave como la energía. Al mismo tiempo, mantiene un respeto por la estructura teocrática de la República Islámica, aunque apoya la idea de reformas graduales.
Partido de la Confianza Nacional
Fundado en 2005 por Mehdi Karroubi, expresidente del Parlamento, el Partido de la Confianza Nacional es otro partido reformista que se posiciona en favor de una mayor participación ciudadana y la reforma del sistema político de Irán. Este partido ha sido particularmente crítico con las restricciones a la libertad de expresión y los arrestos de activistas políticos. Karroubi fue una figura clave en el Movimiento Verde de 2009, que cuestionaba la legitimidad de las elecciones presidenciales de ese año.
Partido Nedaye iraní
Este partido reformista, fundado en 2014 por exmiembros de la rama joven del Frente de Participación, adopta un enfoque más pragmático, con una visión centrada en la modernización del sistema político y la apertura económica. Su enfoque está menos centrado en el enfrentamiento directo con el sistema clerical y más en la creación de un entorno político en el que se puedan realizar reformas graduales y mejorar las condiciones de vida de los iraníes. Apoya una economía de mercado regulada y una política exterior que busque la estabilidad regional y el acercamiento a Occidente.
Partidos conservadores
Sociedad del Clero Combatiente
La Sociedad del Clero Combatiente es uno de los partidos más influyentes en Irán y representa la facción más conservadora dentro del establishment político. Fue fundada en 1977 por varios clérigos que participaron activamente en la Revolución Islámica y ha mantenido una fuerte presencia en la política iraní desde entonces. Este partido defiende la preservación de los principios de la Revolución Islámica y la continuación de la política de velayat-e faqih, que otorga al Líder Supremo un poder decisivo en todos los asuntos del Estado.
En términos económicos, la Sociedad del Clero Combatiente favorece un modelo de economía controlada por el Estado, especialmente en sectores clave como la energía, la banca y la industria pesada. También es crítico hacia cualquier intento de normalización de las relaciones con Occidente, en particular con Estados Unidos e Israel. En cuanto a las libertades civiles, este partido promueve una visión estricta de la moral islámica y defiende una fuerte regulación sobre la vestimenta, la libertad de expresión y el comportamiento social.
Partido de la Coalición Islámica
El Partido de la Coalición Islámica es otro de los partidos conservadores con influencia en la política iraní. Fundado en la década de 1960, este grupo ha estado estrechamente relacionado con la economía bazarí (el mercado tradicional iraní) y ha sido un defensor incontestable de la República Islámica. Al igual que la Sociedad del Clero Combatiente, el Partido de la Coalición Islámica apoya la velayat-e faqih y se opone a cualquier tipo de liberalización política que ponga en peligro el control del clero sobre el Estado.
A nivel económico, aunque defiende una intervención estatal significativa, también apoya la protección de los pequeños y medianos empresarios, especialmente aquellos asociados con los bazares. En política exterior, se alinea con la postura oficial de resistencia contra la influencia de Occidente y defiende una alianza estrecha con otros estados islámicos, como Siria y Líbano.
Partidos centristas
Partido de los Ejecutivos de la Construcción
Fundado por los aliados del expresidente Akbar Hashemí Rafsanjani, este partido ocupa un lugar centrista en la política iraní y se ha destacado por su enfoque más pragmático en la gestión del país, centrado en el funcionamiento eficaz de la economía. Rafsanjani, quien fue presidente entre 1989 y 1997, promovió una serie de reformas económicas orientadas hacia la liberalización del mercado y la atracción de inversiones extranjeras para reconstruir el país tras la devastadora guerra entre Irán e Irak (1980-1988).
El partido aboga por una economía de mercado regulada, donde el Estado intervenga para asegurar una distribución equitativa de los recursos, pero con mayor libertad para los actores privados. En política exterior, favorece una diplomacia que promueva los intereses de Irán sin confrontar innecesariamente a las grandes potencias. Aunque no cuestionan abiertamente el sistema teocrático, defienden reformas que permitan una mayor participación política y un espacio para la oposición.
Partido Laborista Islámico de Irán
El Islamic Labour Party está alineado con los intereses de la clase trabajadora iraní y busca la implementación de políticas que favorezcan a los obreros y empleados públicos. Aunque se considera dentro de la esfera conservadora por su apoyo al sistema teocrático, este partido también aboga por una mayor justicia social, mejores condiciones laborales y un enfoque económico que mejore el bienestar de las clases populares. Su visión es una mezcla de islamismo y populismo social, buscando un equilibrio entre la intervención estatal y la protección de los derechos laborales.
Partidos clandestinos
Frente de Participación de Irán Islámico
El Frente de Participación de Irán Islámico es uno de los principales partidos reformistas, aunque desde 2010 está ilegalizado. Este grupo político surgió a finales de los años 90 durante el mandato del presidente Mohammad Jatamí, que abogaba por un sistema político más abierto, transparente y con mayores libertades para los ciudadanos. Los reformistas buscan promover los derechos civiles, aumentar las libertades individuales y fomentar una mayor participación política en Irán. También defienden una mejora en las relaciones internacionales, especialmente con Occidente.
El partido considera que la República Islámica debe modernizarse, sin abandonar su carácter islámico, pero adaptándose a los desafíos del siglo XXI. Defienden una mayor libertad de prensa, una menor intervención estatal en la vida privada y un sistema judicial más independiente. Sin embargo, a lo largo de los años, el Frente de Participación ha enfrentado una fuerte represión por parte de los conservadores y muchos de sus miembros han sido detenidos o inhabilitados.
Organización de los Muyahidines del Pueblo de Irán (MEK)
Este grupo es uno de los más conocidos fuera de Irán por su oposición abierta al régimen de los ayatolás. Fundado en los años 60 como un movimiento guerrillero marxista-islámico, el MEK fue un actor clave en la Revolución Islámica, pero pronto fue marginado por los líderes clericales. Desde entonces, ha sido fuertemente reprimido y opera en la clandestinidad. En la actualidad, es considerado una organización terrorista por el gobierno iraní, pero cuenta con apoyo de algunos sectores en Occidente.
El MEK defiende el derrocamiento del régimen teocrático en favor de un gobierno laico y democrático. También promueve la igualdad de género y los derechos humanos, y aunque en su origen era marxista, ha abandonado en gran medida esas posiciones en favor de una ideología más liberal y prooccidental.