Imagen de José Luis Ábalos/Obtenida de notitotal.com
Los motivos por los que el exministro de Transportes conserva el escaño son muchos. De entre todos ellos el aforamiento es uno de los más importantes. Pero, ¿Qué implica ser aforado?
El aforamiento en la política española.
El aforamiento, es una prerrogativa legal cuyo efecto es otorgar cierta inmunidad procesal a determinadas personas. Ya sean políticos o altos funcionarios públicos en España. Esto viene a significar que en su caso no se sigue un procedimiento ordinario; sino que serán procesados por determinados tribunales distintos de los del resto de ciudadanos.
Esta prerrogativa tiene su sustento en el artículo 71.3 de la Constitución Española. En dicho precepto se reconoce el estatus de aforados a senadores y diputados. En tal caso el enjuiciamiento lo realizará la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo.
El número de aforados en España es de los más grandes de Europa. Concretamente unos 250.000 aforados; de los cuales el grueso responde a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Tienen reconocido el derecho de aforados el Presidente y demás miembros del Gobierno, que serán juzgados por el Tribunal Supremo, así como los presidentes autonómicos consejeros de sus ejecutivos, que serán juzgados por el Tribunal Supremo o los Tribunales Superiores de Justicia, según sus Estatutos de Autonomía. Los Senadores y diputados , disfrutan de esta peculiar situación. Jueces y magistrados también están adheridos al aforamiento
Privilegios y procedimiento para juzgar a un aforado.
En el supuesto de que algún aforado sea requerido por la Justicia, se ha de seguir un proceso largo y tedioso. Si se trata de diputados y senadores, como Ábalos, la única forma de que puedan ser investigados por la Justicia es elevando un suplicatorio de la autoridad judicial al órgano competente, que, se encargará de autorizar la investigación o no. Si finalmente el órgano competente (en el Parlamento sería la Mesa del Congreso y en el Senado, la Mesa del Senado) autoriza dicho suplicatorio, la se iniciaría la investigación en el fuero especial asignado.
¿Cómo afectaría a Ábalos en el «Caso Koldo»?
La instrucción del «caso Koldo» la lleva a cabo la Audiencia Nacional (Juzgado Central de Instrucción Nº2). En caso de Investigar a José Luis Ábalos, la Audiencia Nacional debe solicitar el suplicatorio mediante escrito a la mesa del Congreso. Dado que Ábalos, mantiene su acta de diputado, será la presidencia de la Cámara Baja quien autorice si se debe seguir indagando en la investigación. Ello implica una dilación para poder procesar al exministro de Transportes.
Pese a todo la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim), faculta al alto tribunal para citar al investigado antes de que pueda obtenerse dicho permiso. Se le da oportunidad de declarar «de forma voluntaria», una prerrogativa que vienen cumpliendo muchos de los que han implicados en tramas de corrupción alegando que prefieren adelantar sus explicaciones cuanto antes.
En caso de que se autorice el suplicatorio, Ábalos será procesado, pero su enjuiciamiento recaerá en la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo. Si Ábalos hubiese renunciado a su acta de diputado, la instrucción seguiría su curso ordinario y sería juzgado por un tribunal al uso, como cualquier otro justiciable.