Una de las novelas más célebres del autor francés Alejandro Dumas, El Conde de Montecristo, regresa a la gran pantalla con una producción francesa que ha alcanzado un presupuesto de aproximadamente 42 millones de dólares, posicionándose como la película más costosa de Francia en lo que va del año. La película ha sido recibida con críticas sumamente favorables, lo que aumenta aún más la expectativa por verla.
Antes de profundizar en los detalles, es importante mencionar que ya contamos con varias adaptaciones que han sido extraordinarias. Quizás la más reconocida sea la miniserie de cuatro episodios de 1988, dirigida por Josée Dayan, Le Comte de Monte Cristo, un programa que recuerdo que solía emitirse con frecuencia en televisión. En 2002, se estrenó la versión estadounidense protagonizada por Jim Caviezel, titulada La venganza del conde de Montecristo, que también recibió críticas favorables y que, a mi juicio, sigue siendo una excelente película. De un enfoque más comercial, esta versión es posiblemente más accesible para el público general, siendo una buena introducción a la obra de Dumas.
No podemos olvidar la versión más antigua, la primera, de 1934, titulada The Count of Monte Cristo, que fue un notable descubrimiento en su época y no está nada mal. Si bien han existido otras adaptaciones televisivas, considero que no es necesario mencionar todas; las dos primeras son suficientes, destacando también esta última como pionera.
En la actualidad, es importante destacar que contamos con pocas producciones históricas en las salas de cine, dado que el público suele inclinarse hacia otros géneros. Como resultado, muchas de estas películas lamentablemente fracasan en taquilla. Sin embargo, son necesarias por varias razones: primero, para dar a conocer esta novela y fomentar la cultura lectora; segundo, porque este tipo de cine artístico, que prioriza la época y la historia, nos permite sumergirnos en el pasado como experiencia visual; y tercero, porque, como dijo Martin Scorsese, sin estas producciones el cine podría convertirse en «un parque de atracciones». El séptimo arte es el más completo de todos, ya que combina diversas formas de expresión artística en una sola. Además, si no se generan estas obras, tristemente, este género sería escasamente visible. Por último, adaptar una historia clásica a los tiempos actuales, siempre y cuando se respete la obra original y se enfoque en la actualidad, puede resultar beneficioso.
¿Digna versión para los tiempos actuales?
Tras verla, puedo afirmar que estamos ante la sorpresa del año. Esta obra cinematográfica es exquisita y ha logrado capturar la esencia de la novela de manera perfecta. Como adaptación, es la mejor y más completa que se ha realizado hasta la fecha. Las tres horas de duración se pasan volando, gracias a un guion excepcional, diálogos memorables y una banda sonora que te transporta a un concierto de Mozart en directo, con música clásica sonando en cada instante. Las actuaciones son sobresalientes, y el acabado técnico en la escenografía es impecable. La puesta en escena y el vestuario están elaborados con un gran nivel de detalle, sumergiéndonos en el siglo XVIII. Las caracterizaciones y el maquillaje también han sido cuidados al máximo. Como pueden ver, todos estos comentarios son elogios y más elogios hacia una película que esperaba que fuera buena, según las críticas leídas, pero que resultó ser tan excepcional que me dejó boquiabierto al finalizar. De hecho, el final me hizo derramar una lágrima.
La gran joya de la corona es, sin duda, Pierre Niney, el actor francés que interpreta al Conde de Montecristo. Su actuación es tanto evolutiva como física, convirtiéndose en una de las interpretaciones más sobresalientes del año.
Aunque el resto del reparto y todos los personajes están interpretados de manera impecable, cada uno tiene su momento en la trama. La película se siente diferente en su enfoque de la historia en comparación con las adaptaciones anteriores, y en ello reside su magia; han logrado condensar una novela extensa en tres horas. Sin embargo, quizás lo único negativo es que algunos acontecimientos transcurren demasiado rápido, y la leyenda de la máscara, un objeto importante de la obra, no se desarrolla en profundidad, quedando algo superficial. Se comprende que esta decisión se tomó para dar mayor atención a la narrativa de la venganza y a las consecuencias de la traición en la historia.
Para quienes no conocen la obra, resumo la historia brevemente: Edmond Dantès es traicionado y cumple una condena injusta en una prisión en un castillo, viviendo una pesadilla que se extiende durante 13 años. A lo largo de este tiempo, se propone hacer todo lo posible para buscar la venganza contra aquellos que lo han condenado de manera despiadada e injusta.
Es una obra que nos invita a conocernos a nosotros mismos, a explorar nuestro potencial humano interiorizado y a aceptar el dolor y el sufrimiento como partes inevitables de la vida, lo que nos permite aprender a lidiar con ellos. Es un regalo para cualquier amante del cine y una experiencia imperdible para los seguidores de las grandes obras. Para los lectores, representa la oportunidad de vivir una novela en primera persona. Este film rinde homenaje al cine de época, y aunque es cierto que se asemeja a un cine más clásico, resulta difícil encontrar hoy en día una adaptación tan bien realizada y cuidada con tanto esmero. Sin duda, se posiciona como una de las mejores películas y adaptaciones de los últimos años.