Fotograma de Terminator Zero
Una de las franquicias de acción más icónicas de la historia del cine regresa, pero de una manera inesperada. Tras la última entrega, Terminator: Destino Oscuro, que fue en general una decepción crítica y un retroceso para la saga, la franquicia parecía haberse perdido. Desde Terminator 2, no han conseguido replicar el éxito de una gran película, aunque debo reconocer que soy partidario de Terminator 3. A pesar de ser inferior, la considero una buena película de acción, aunque algo sencilla.
Ahora en Netflix está disponible Terminator Zero, una versión anime de la saga que ha recibido excelentes críticas de gran parte de los medios. Entre el público, la recepción ha sido más mixta, aunque no le ha ido mal en general. Durante estos meses, se ha generado mucha expectación, ya que el nombre Terminator sigue despertando interés y atrayendo la atención del público. Además, hace pocos meses, James Cameron confirmó que hay una nueva película en desarrollo dentro de la franquicia, lo que resulta emocionante..
Terminator Zero se estrenó en Netflix con 8 episodios, cada uno de unos 28 minutos de duración, por lo que prácticamente puedes verla en una tarde. Su creador es Mattson Tomlin, quien anteriormente dirigió y escribió Proyecto Power, también de Netflix (una película algo discreta), y Madre/Androide, otra obra de ciencia ficción en la misma plataforma (también de recepción moderada). Aunque Tomlin no cuenta con un historial de proyectos sobresalientes, como dice el dicho, «más vale tarde que nunca». Con esta serie, a pesar de tener margen de mejora, ha logrado un trabajo sólido en términos generales.
Terminator Zero es una serie anime que se inspira en la franquicia original, respetando muchos de sus elementos estéticos a lo largo de los episodios. La trama se sitúa en 2022, en medio de una guerra que ha durado varias décadas y ha causado millones de muertes, dejando a la humanidad al borde de la extinción. Por un lado, están los pocos supervivientes que permanecen en la Tierra, y por otro, las máquinas. El conflicto se originó en 1997, cuando una inteligencia artificial llamada Skynet tomó conciencia de sí misma y declaró la guerra contra la humanidad.
Un soldado del año 2022 es enviado al pasado con la misión de proteger a Malcolm Lee, un científico clave en la creación de Skynet. A medida que avanzan los episodios, la trama se va revelando poco a poco. Aunque el comienzo es algo lento, la historia mejora progresivamente, manteniendo el interés del espectador conforme se desarrollan los acontecimientos.
Un si con bastantes matices
La pregunta es: ¿ha cumplido la serie con las expectativas? En resumen, podríamos decir que cumple siendo una buena serie, pero tiene un gran margen de mejora para llegar a ser excelente. Esa es la sensación general que deja. Un aspecto positivo es que la serie mejora conforme se acercan los episodios finales. Sin embargo, también es cierto que intenta abarcar demasiado en poco tiempo y recurre a constantes giros argumentales, algunos sorprendentes, pero otros más predecibles y carentes de originalidad.
En cuanto a la animación, no es espectacular. He visto muchos animes y producciones de animación que son superiores en este aspecto. Dicho esto, no es mala, simplemente correcta. Lo que realmente destaca son algunos planos impresionantes acompañados de una fotografía poderosa, especialmente en las explosiones y los momentos clave. Los efectos de sonido son excelentes, y aunque la banda sonora no es memorable, cumple su función, aunque podría haber sido más impactante.
Las secuencias de acción, aunque efectivas, a veces se sienten toscas debido al uso del 3D, que no está del todo bien logrado. Aun así, hay margen de mejora. La serie incluye varios guiños a Terminator 1 y Terminator 2, desde frases icónicas hasta inspiraciones visuales y momentos que se resuelven de forma familiar, lo que es un acierto para los fans de la franquicia. Aunque la serie no arriesga demasiado, introduce una nueva inteligencia artificial llamada Kokoro, que mantiene una relación con el protagonista. A través de esta IA, se aborda el problema humano con las guerras, con diálogos que, aunque algo superficiales, resultan efectivos. Se intenta profundizar en la autodestrucción de la humanidad y su ceguera ante la guerra y la muerte, un tema interesante que, aunque no aporta mucho a la trama principal, cobra relevancia hacia el final.
Un problema que encuentro en la serie es que, en ocasiones, se complica demasiado con varias tramas: la del Terminator, la IA, Malcolm, los hijos y la soldado enviada del pasado. Aunque todas convergen en un mismo punto, algunas no resultan tan sólidas ni atractivas, repitiendo conceptos algo trillados o ya vistos en otras ocasiones.
Un punto a favor son sus episodios finales, que, aunque están llenos de acontecimientos, logran dejar las piezas en el tablero de manera perfecta para una siguiente temporada. Una vez presentados el mundo y los personajes, así como algunos giros, aunque no memorables, cumplen, y dejan todo listo para una segunda temporada que promete mucho y podría solucionar los problemas que esta primera entrega ha presentado.
En resumen, es una serie que, aunque no es sobresaliente, tiene momentos muy buenos. Se trata de un producto interesante para una franquicia que estaba muy perdida y sin rumbo. Es un «sí», aunque no del todo sólido, que seguramente gustará al público en general y que, personalmente, me ha convencido. Recomiendo verla para saber cómo continúa.