Bangladés se encuentra en estado de emergencia tras la reciente dimisión de su primera ministra, Sheikh Hasina, y el significativo aumento de la violencia en el país. La situación se ha deteriorado drásticamente en las últimas 24 horas, con un número de fallecidos que supera los 400 debido a los enfrentamientos y disturbios generalizados.
Dimisión de Sheikh Hasina
Sheikh Hasina, quien lideró el país durante 15 años y es una figura emblemática en la política del Sur de Asia, dimitió el lunes y abandonó el país en un helicóptero militar. Hasina, hija del ‘padre fundador’ de Bangladés, Sheikh Mujibur Rahman, dejó el poder en medio de una ola de protestas y agitación. Su salida marcó el fin de una era en la política bangladesí y desató una serie de eventos que han sumido al país en el caos.
La decisión de Hasina de dimitir y abandonar el país fue precedida por un aumento significativo en las protestas y disturbios. Estas movilizaciones comenzaron a principios de julio, después de que el Tribunal Supremo ordenara al Gobierno restablecer una cuota del 30% de empleo para los descendientes de los combatientes de la guerra de liberación de 1971. Esta medida, que favorecía a los seguidores de Hasina, provocó un descontento generalizado y movilizó a miles de personas en protestas que se volvieron violentas.
Disolución del Parlamento y Formación de un Gobierno Interino
En respuesta a la crisis, el presidente Shahabuddin, tras consultas con los jefes de las fuerzas armadas, líderes políticos y representantes de la sociedad civil, anunció la disolución del Parlamento. Este paso es crucial para permitir la formación de un Gobierno interino con el objetivo de restaurar el orden y la estabilidad en el país. La formación de este nuevo gobierno será una tarea compleja, ya que debe enfrentar la violencia persistente y atender las demandas de los ciudadanos.
El jefe del Ejército, Waker-Uz-Zaman, también confirmó la creación de un Gobierno interino para reemplazar a Hasina. Sin embargo, hasta el momento, no se han revelado los nombres de los posibles candidatos para encabezar el nuevo gobierno. Las conversaciones para formar este gobierno provisional incluyen discusiones con los principales partidos políticos, incluida la Liga Awami, el partido de Hasina.
Situación Actual en el País
La situación en Bangladés sigue siendo extremadamente volátil. A pesar de la formación de un Gobierno interino y de la revocación del toque de queda por parte del Ejército, la violencia no ha cesado. En las últimas 24 horas, al menos 99 personas han muerto en diversos enfrentamientos y disturbios. El Hospital General del distrito de Jashore Occidental ha reportado la muerte de 20 personas en un incendio que destruyó un hotel presuntamente propiedad de un líder de la Liga Awami. Además, el Hospital de la Facultad de Medicina de Daca ha recibido 41 cadáveres relacionados con la violencia en la ciudad y sus alrededores.
Los hospitales están abrumados por la cantidad de heridos. En el Hospital General de Jashore Occidental, se han tratado a un centenar de heridos, de los cuales 30 se encuentran en estado crítico. El Hospital de la Facultad de Medicina de Enam en Savar también ha reportado que cinco personas fueron trasladadas muertas el lunes por la noche, mientras que otras seis fallecieron mientras recibían tratamiento.
A pesar del caos, algunos signos de relativa calma han emergido en Daca. Desde el martes, la revocación del toque de queda ha permitido la reapertura de algunos colegios y el retorno de cierta normalidad a la vida cotidiana. Imágenes recientes muestran comercios abiertos y tráfico fluido en las carreteras. Sin embargo, la situación sigue siendo tensa y la seguridad permanece en un estado precario.
La comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos en Bangladés, observando con atención cómo se desarrollan los eventos y cómo el nuevo Gobierno interino manejará la crisis. La estabilidad del país depende de la capacidad del nuevo liderazgo para restaurar el orden y abordar las demandas de los ciudadanos en un contexto de creciente incertidumbre política y social.