El Departamento de Estado de Estados Unidos ha incluido este viernes al Movimiento de Resistencia Nórdico (NRM, por sus siglas en inglés) y a tres de sus líderes en su lista de «terroristas globales especialmente designados» (SDGT) tras una ronda de «consultas con sus socios europeos».
El portavoz del Departamento, Matthew Miller, ha denunciado la «actitud abiertamente racista, antiinmigrante, antisemita y anti-LGTBI» del grupo y ha recordado que sus «miembros y líderes han llevado a cabo ataques violentos contra opositores políticos, manifestantes, periodistas y otros supuestos adversarios».
Los miembros del NRM también han tomado medidas para recolectar y preparar armas y materiales explosivos, incluso en nombre del grupo y para promover sus objetivos. Además, el NRM ha organizado cursos de formación en tácticas violentas, incluido el combate cuerpo a cuerpo y la lucha con cuchillo, ha destacado Miller.
En este sentido, Miller ha expresado su «profunda preocupación por la amenaza extremista violenta por motivos raciales o étnicos» no solo en países como Suecia, Noruega, Dinamarca, Islandia o Finlandia, donde el grupo neonazi —prohibido desde 2020— cuenta con sucursales, sino «en todo el mundo». Asimismo, se ha comprometido a «contrarrestar los componentes transnacionales de la supremacía blanca violenta».
Como consecuencia de esta decisión, «todas las propiedades e intereses en propiedades de aquellos designados hoy que están sujetos a la jurisdicción de EEUU quedan bloqueados y, en general, a las personas —entidades e individuos— estadounidenses se les prohíbe realizar transacciones con ellos», ha explicado el Departamento de Estado.
Esta decisión llega después de que un niño de 12 años fuera ingresado en estado grave tras recibir varias puñaladas por parte de un presunto activista de extrema derecha en un centro comercial del norte de Finlandia. Fuentes de la radiotelevisión pública finlandesa YLE han identificado al autor como un «antiguo miembro clave» del ilegalizado Movimiento de Resistencia Nórdico, que había sido condenado previamente por otro apuñalamiento durante la presentación de un libro.